Cipolletti: violaba a su hija de 12 durante las salidas transitorias
Es un condenado por abuso sexual.
Cipolletti
El hombre que está sindicado como el “chacal” cipoleño de los abusos y que, semanas atrás, estuvo a punto de recuperar la libertad se encamina a un tercer juicio oral por la violación de su hija menor. Se le imputan tres hechos y las víctimas aguardan la confirmación de su procesamiento.
La causa penal abierta contra A.S. se encuentra en este momento en la Cámara en lo Criminal Segunda de Cipolletti, y se especula que recién en noviembre habría un pronunciamiento tras la apelación presentada por el defensor del acusado. Por tratarse de un hecho de instancia privada y además por ser la víctima menor de edad, no se pueden brindar datos personales del violador.
11 años de prisión efectiva cumple por el abuso de otra hija y de una hijastra.
De igual modo, este diario tuvo acceso a los pormenores de la última audiencia, que se concretó la semana pasada, donde las partes expusieron sus argumentos sobre los hechos que habrían ocurrido durante las salidas transitorias.
Fuentes judiciales precisaron que el acusado cumple una condena de 11 años de prisión efectiva por los abusos a una de sus hijas y a una hijastra que, en la actualidad, tienen 24 y 26 años. El juicio oral se llevó a cabo en el 2007 y, tras cumplir parte de la condena, fue beneficiado con salidas. En esas circunstancias, el Chacal aprovechó para violar a su hija menor, la única que permanecía en su casa.
Los abusos se dieron cuando la víctima todavía era una niña de 12 años y en la etapa instructoria se pudieron identificar tres hechos precisos, incluida una violación, detallaron las fuentes. Con estas pruebas, el titular del Juzgado de Instrucción 4, Santiago Márquez Gauna, no dudó en procesarlo por el delito de abuso sexual con acceso carnal.
Ante la acusación, el abogado del Chacal avanzó con una apelación. La fiscalía y la querella reafirmaron los cargos en su contra y pidieron que se confirme el procesamiento, además de la prisión preventiva.
El chacal
Se emborrachaba y se drogaba
Lo paradójico de la causa penal por abuso sexual agravado en contra de A.S. es que se reactivó luego de un año de no registrar movimiento alguno. Los familiares de las hijas del acusado y las propias víctimas decidieron movilizarse para impedir que recupere la libertad y vuelva a las calles. Ante la repercusión del caso y con el antecedente de la condena de 11 años, la Justicia avanzó con el procesamiento del imputado y puso fin al beneficio de las salidas transitorias.
El chacal estaba en condiciones de acceder a la libertad condicional en agosto y la situación generó gran angustia en sus hijas ante la posibilidad de nuevos ataques sexuales.
A la hora del procesamiento, el juez recalcó que “la víctima no sólo relata que este (su padre) la abusó, sino que contrariando las normas de las salidas transitorias, se alcoholizaba, se drogaba y no se mantenía dentro del domicilio donde estaba autorizada su salida bajo guarda”.
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