Se bajó la persiana. Cipolletti le dijo adiós al torneo con un triunfo en el clásico. Fue 3 a 1 ante Independiente, que ya piensa en los octavos.
Los errores defensivos de la visita se hicieron más notorios y un despeje fallido de Artaza dentro del área rebotó en Mellado y se le metió a Villalba pegado a su palo izquierdo.
El segundo tiempo estuvo de más en La Visera. El Rojo se cuidó y Cipo se despidió con aplausos.
Antes del cierre, Cipo ratificó su superioridad y el mal momento de los del fondo albirrojo que otra vez durmieron ante una pelota que Taborda le bajó a Weiner y este, con categoría, la punteó ante la salida del arquero y definió con el arco a su merced.
El segundo tiempo estuvo claramente de más. Con la ventaja en contra y la clasificación en el bolsillo, los neuquinos comenzaron a pensar más en la siguiente fase.
6 puntos pudo sacar como visitante.
El Rojo consiguió dos victorias fuera de casa, una ante Villa Mitre y otra ante Roca. El resto fueron cuatro derrotas. Dos con Cipo, una con Madryn y otra con Roca.
3 veces se enfrentó ante Cipo y no tuvo triunfos.
Fue al único equipo al que no pudo ganarle en toda la etapa. Sacó sólo 1 de los 9 puntos que puso en juego. Además, recibió 8 goles entre los tres partidos.
Mientras, Cipo siguió intentando aunque amainó su intensidad. Weiner, el mejor del partido, comandó la más clara de la etapa pero Mellado no pudo aprovechar la habilitación y dilapidó el mano a mano. Antes Taborda también había exigido al 1 con un cabezazo a quemarropa.
No hubo mucho más en La Visera de Cemento, que fue testigo de otra victoria albinegra ante el Rojo, aunque no en el marco deseado para el local. La victoria aplacó los ánimos de un público, que incluso despidió con aplausos a su equipo. El Rojo no se fue feliz, pero ya hizo borrón y cuenta nueva y piensa en lo más importante: Libertad de Sunchales.
Te puede interesar...
Lo más leído
Dejá tu comentario