Admitió haber violado y embarazado a su hija de 14 años
El hombre estuvo prófugo hasta inicios de este año, cuando se lo capturó y acusó por los hechos. Ahora, admitió su responsabilidad para no ir a juicio.
Un violador que pasó dos años prófugo, finalmente respondió ante la Justicia y admitió haber violado reiteradamente y embarazado a su propia hija adolescente para evitar el juicio. Ahora, se le deberá fijar la pena de prisión efectiva correspondiente.
Según pudo conocer LMNeuquén, el caso salió a la luz en 2020 cuando la adolescente de 14 años cursaba ya su quinto mes de embarazo producto de las reiteradas violaciones a las que la sometía su padre. Es que el hombre estaba separado de la madre de la víctima, y por eso vivía en otro domicilio y sólo veía a la niña los fines de semana, días en que la niña se quedaba a dormir con él.
En esas ocasiones se daban las violaciones, que se desarrollaron a lo largo de por lo menos dos años, desde que la víctima tenía 12.
A raíz de algunos indicios directamente ligados al embarazo, además de cambios en el comportamiento de la adolescente, la madre de la joven comenzó a sospechar de lo que ocurría y una visita al médico confirmó el embarazo de cinco meses en marzo de 2020. De inmediato, se puso en marcha el protocolo por abuso y la víctima fue asistida y entrevistada. Así, la adolescente se animó a contar que era violada por su padre desde hacía tiempo cuando iba a visitarlo y que había sido amenazada con que si contaba algo, su hermana "la iba a pagar".
La denuncia formal dio lugar también a la investigación a cargo de la Fiscalía de Delitos Sexuales, la víctima atravesó la pericia de Cámara Gesell y otros estudios, tuvo al bebé producto de los abusos y también se añadió su análisis de ADN al cúmulo de prueba. Finalmente, a comienzos de 2021, se solicitó la audiencia para formularle cargos al hombre.
Sin embargo, la misma nunca se pudo concretar, siendo que el denunciado no se hizo presente. Esto dio lugar a otras tres reprogramaciones de dicha audiencia, y finalmente en diciembre de ese año, un juez dictó la rebeldía del imputado y libró una orden de captura nacional e internacional.
Recién en febrero de este año, el violador fue ubicado y acusado como autor del delito de abuso sexual con acceso carnal continuado, agravado por el vínculo y la convivencia preexistente con una menor de 18 años. Además, por el riesgo de una nueva fuga, quedó detenido en prisión preventiva a la espera del juicio.
No obstante, como se comunicó en audiencia este jueves, las partes arribaron a un acuerdo para acortarse el proceso y el hombre aceptó declararse responsable para no ir a juicio y enfrentar posiblemente una pena mucho mayor.
Tanto el fiscal Manuel Ignacio Islas, como la defensora de los derechos del niño y el adolescente Andrea Rapazzo, el abogado particular que intervino como querellante en representación de la familia de la víctima, y el imputado y su defensa, prestaron conformidad con el acuerdo parcial.
En los próximos días, la Oficina Judicial deberá fijar la fecha para la realización del juicio de cesura, donde se determinará la pena de prisión efectiva que le corresponde cumplir al ahora condenado.
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