El cáncer colorrectal es una de las patologías de mayor prevalencia en el país, y una de las que más preocupa. Escribe María Laura Rochietta, médica gastroenteróloga del CMAC (*).
El cáncer colorrectal (CCR) es uno de los tumores malignos más frecuentes y representa un problema de salud pública a nivel mundial. En nuestro país, es el segundo cáncer más común, luego del cáncer de mama.
En más del 80% de los casos el CCR tiene una lesión precursora benigna, el pólipo adenomatoso o adenoma. Los adenomas representan el 70% de los pólipos colónicos diagnosticados, son más frecuentes en hombres y su incidencia aumenta con la edad. La progresión de los adenomas hacia el CCR es un proceso que se desarrolla paulatinamente (se estiman 10 años para adenomas menores a 1 cm), lo que brinda una ventana amplia para su detección y resección.
El 75% de los CCR son esporádicos y se desarrollan en personas que no presentan antecedentes personales ni familiares de la enfermedad, siendo la edad el principal factor de riesgo.
El 25% restante corresponden a personas con riesgo aumentado de padecer este tipo de cáncer. En dicho grupo se incluyen pacientes con:
* Antecedente personal de adenoma o CCR (en el caso de los adenomas, este riesgo depende del número y tamaño de los mismos).
* Enfermedad inflamatoria intestinal (colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn), relacionado con el proceso de inflamación crónica de la mucosa colónica.
* Antecedente familiar de adenoma o CCR, dependiendo del número de familiares, grado de parentesco y la edad de aparición del cáncer.
* Antecedentes de enfermedades hereditarias (Poliposis adenomatosa familiar, sindrome de Lynch).
Chequeos que salvan vidas
A partir de los 50 y hasta los 75 años es necesario que todas las personas, aún asintomáticas, se efectúen exámenes regulares para detectar y extirpar pólipos adenomatosos o diagnosticar y tratar el cáncer colorrectal en un estadio temprano. En caso de tener riesgo aumentado, según lo nombrado anteriormente, puede ser necesaria la realización de estudios a más temprana edad.
Métodos de detección
Dentro de los estudios de detección recomendados para la prevención de CCR podemos incluir:
- Test inmunológico de sangre oculta en materia fecal: evalúa la presencia de sangre microscópica en la materia fecal, es decir imperceptible a simple vista. Es un método simple, no requiere preparación previa. De ser negativo, debe repetirse de forma anual.
- Colonoscopía: es un estudio endoscópico que utiliza un tubo flexible con una cámara para examinar el colon y el recto. De esta manera permite la detección y extirpación de pólipos y la detección de cáncer. La realizan médicos endoscopistas especializados, requiere preparación del intestino y se realiza con sedación, por lo cual la persona no siente dolor ni malestar. Es el método de elección en pacientes sintomáticos y para las personas con test de sangre oculta en materia fecal positiva. La edad óptima para la realización de la colonoscopía es a los 50 años de edad.
Otros estudios de detección son:
- Colon por enema: consiste en la introducción de un líquido de contraste y aire a través de una cánula anal. Luego se obtienen radiografías para lograr la visualización del colon y del recto. Al igual que la colonoscopía, requiere preparación con laxantes.
- Colonoscopia virtual por TAC: se realiza mediante una tomografía computarizada que permite examinar el colon y recto mediante la reconstrucción virtual efectuada por una computadora. Este estudio requiere preparación del intestino, se hace sin sedación y en caso de hallarse alguna patología debe complementarse con una colonoscopia convencional.
Es por ello que estratificar correctamente el riesgo de cáncer colorrectal e indicar el estudio correcto en el momento correcto previene dicha patología.
Las recomendaciones generales, para tener en cuenta, son:
* Consumir una dieta rica en fibras (vegetales y frutas).
* Reducir el consumo de carnes rojas y grasas de origen animal.
* Ingerir productos ricos en calcio.
* Realizar ejercicio físico regularmente.
* Evitar el sobrepeso.
* Moderar el consumo de alcohol.
* Evitar el tabaco.
No suele presentar síntomas hasta una etapa avanzada. Las personas con cambios en el hábito evacuatorio, dolor abdominal frecuente, anemia o pérdida de peso deben ser valoradas por el especialista.
(*) Médica especialista del Centro Médico Ambulatorio Cipolletti (Mengelle 631) de Leben Salud. Forma parte del equipo de Gastroenterología, integrado por: Dr Hugo Otaño, Dra Nadia Perron, Dra Carla Amadey, Dr Adrián Mendoza, Dr Daniel Radziwiluk y Dr Rubén Mombru.
Te puede interesar...
Lo más leído
Dejá tu comentario