Se casó María Eugenia Vidal: la fotos y el look de la boda
La diputada celebró su unión con el periodista Enrique "Quique" Sacco con un íntimo festejo en una estancia de San Antonio de Areco.
Tratando de pasar desapercibidos, sin invitados ni prensa alrededor, María Eugenia Vidal y Enrique "Quique" Sacco se casaron el pasado jueves 23 en el registro civil de la calle Uruguay, en la Ciudad de Buenos Aires. Ayer, sábado 25 de marzo, celebraron su boda en una estancia de San Antonio de Areco, en el norte de la provincia de Buenos Aires.
La diputada y el periodista deportivo se conocieron en 2019, cuando ambos estuvieron invitados a la mesa de Mirtha Legrand. Vidal estaba separada de su marido, el exintendente de Morón Ramiro Tagliaferro. Y Sacco había enviudado un año antes, tras la trágica muerte durante un procedimiento médico de la periodista Débora Pérez Volpin.
Los novios querían un festejo íntimo y familiar que no superara el centenar de invitados, pero la lista terminó cerrándose en 108 personas que compartieron con ellos este momento tan especial. Además de amigos y familiares, se pudo ver entre los presentes al expresidente Mauricio Macri y su mujer, Juliana Awada.
También estuvieron presentes Horacio Rodríguez Larreta junto a su pareja, Milagros Maylin, y un pequeño grupo de dirigentes en el que estaban Cristian Ritondo, Hernán Lacunza, Darío Nieto y Federico Salvai junto a su mujer, Carolina Stanley, Quienes no recibieron la invitación fueron la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, ni Elisa Carrió, una de las referentes de Juntos por el Cambio.
Del ámbito del espectáculo y la televisión estuvieron Gustavo Yankelevich y su pareja, Rosalla della Giovampaola, el periodista deportivo Enrique "Quique" Wolf y el empresario Fernando Marín, entre otros.
El evento comenzó poco después de las 19 y se llevó a cabo en la Estancia El Rosario, a unos 100 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires. El campo de 100 hectáreas se encuentra en la afueras de San Antonio de Areco y tiene una connotación especial para la pareja. La exgobernadora bonaerense lo descubrió hace un año y es el refugio preferido por ella y por Quique tomarse unos días de descanso.
María Eugenia y Quique eligieron una boda descontracturada. En lugar de las clásicas mesas optaron por cómodos livings armados en el parque de la estancia, sin lugares preestablecidos, de modo que los invitados pudieran moverse con libertad para interactuar con quien quisieran hacerlo.
El menú estuvo compuesto por copetines, finger food y pizzas de todos los sabores imaginables. Una amplia mesa dulce con la clásica torta de bodas coronó la parte gastronómica de la noche. Y la música estuvo a cargo del Grupo Sarapura, que hizo bailar a los presentes hasta bien entrada la madrugada.
El vestido de la diputada fue diseñado por Gabriel Lage, que también vistió a sus dos hijas -Camila y María José- y a Luna - la hija de Débora Pérez Volpin-. Pedro -hijo de Vidal con Tagliaferro- y Agustín Funes -hijo de Pérez Volpin-, vistieron de traje igual que Quique Sacco, quien no tiene hijos pero considera los de sus parejas sus "hijos del corazón".
Según el diseñador, que facilitó el figurín del modelo que lució Vidal, el vestido es "una pieza de haute couture sobre transparencia nube en tonalidad nude con superposición de redecilla de encajee incrustaciones de guipurado de hilo de seda y un delicado detalle de bordado en escote".
La probable candidata a presidente eligió un maquillaje natural en el que se resaltaron sus pestañas para dar marco a la mirada. El pelo suelto y la ausencia de joyas destacaban el estilo minimalista de su look. Al tratarse de una boda campestre no había un dress code designado para los invitados, por lo que primó el elegante sport en todos los presentes.
“Nos casamos! Gracias a Dios por habernos encontrado. Gracias a Cami, Majo, Pedro, Agustín y Luna por habernos acompañado. Volvemos a creer en el amor y en la mesa grande de familia. Nos elegimos con nuestros años de aprendizaje, en nombre de todo el futuro que soñamos por delante, escribió Vidal en sus redes sociales.
"Nos elegimos con nuestras responsabilidades y compromisos, para acompañarnos. Nos elegimos para compartir la vida. Nos casamos porque somos enormemente felices juntos”, fueron también sus emotivas palabras.
Parte del encuentro mágico que los unió tuvo que ver con Mirtha Legrand, que los sentó juntos en su mesa. Sin embargo, la celestina de la pareja no recibió su invitación a la boda. En cambio, le llegó un mensaje de disculpas de parte de la exgobernadora.
“Me mandó un largo mensaje María Eugenia donde me dice que es un casamiento con exclusividad de familia, que más adelante me van a invitar. Y se disculpó”, detalló la conductora. “A Mirtha siempre le vamos a estar agradecidos” , le dijeron los novios a la prensa presente en la puerta de la estancia, antes de volver a entrar para festejar con la familia y los políticos presentes en el evento.
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