La empresa de Elon Musk realizaba la prueba del cohete en Texas cuando explotó y generó una gran bola de fuego. No se registraron heridos.
Un cohete Starship de la empresa de Elon Musk, SpaceX, explotó en la madrugada de este jueves y generó una gran bola de fuego que asustó a todos aquellos que estaban mirando la transmisión en vivo que se realizaba del lanzamiento.
Afortunadamente, no se registraron heridos. Se trató de una prueba de encendido estático en la plataforma de lanzamiento de Starbase, en Texas, Estados Unidos. Desde la empresa indicaron, además, que la nave "experimentó una anomalía importante" alrededor de las 23 horas.
A través de un comunicado que publicaron en su cuenta de X, SpaceX indicó que se había establecido un perímetro de seguridad alrededor de la zona durante toda la operación, asegurando que todos los miembros del personal se encontraban fuera de peligro y ubicados en lugares seguros.
El cohete experimentó al menos dos explosiones consecutivas, iluminando así el gran cielo nocturno y lanzando escombros por los aires. Por otro lado, la empresa agregó que se encuentran trabajando junto a las autoridades locales para investigar las causas de la explosión y coordinar las acciones necesarias tras el incidente.
Este sistema es con el que Elon Musk planea enviar humanos a Marte, aunque en el último tiempo ha tenido varias fallas.
La estrategia que propone la empresa se basa en lanzar múltiples prototipos en fases reales de prueba, lo que permite a sus ingenieros detectar fallos y rediseñar componentes en función de los resultados. Esta metodología ha sido reconocida como de alto riesgo, pero también como una de las claves del avance acelerado de la empresa espacial.
El antecedente de SpaceX con los accidentes
Este incidente se suma a una serie de antecedentes con los que cuenta la compañía de Musk, de varias fallas en los últimos meses. El último ocurrió el pasado 27 de mayo, cuando una de las naves, tras el lanzamiento de prueba, pudo alcanzar la órbita terrestre pero se rompió y luego cayó al perder combustible en el océano, precisamente en el mar Caribe.
Este cohete, con una altura de 121 metros, estaba compuesto por dos partes: el propulsor Super Heavy, dotado con 33 motores Raptor y que por primera vez se reutilizaba tras una prueba anterior, y una nave espacial de segunda etapa, esta última a la que se llama Starship.
Luego de este accidente, Musk indicó que una fuga de fuel es la que provocó una pérdida de presión en el tanque. "Starship consiguió llegar a la separación programada del motor de la nave, así que es una gran mejora respecto al último vuelo", resumió en su cuenta de X.
Qué se sabe sobre el cohete "Starship"
Starship, la nave insignia de SpaceX, ha sido diseñada como la nave más grande y poderosa jamás construida. Su capacidad de carga, combinada con su tecnología avanzada, la convierten en el vehículo ideal para misiones de larga duración y aterrizajes complejos como los que se requieren en Marte.
En abril del año pasado logró superar uno de los retos más grandes en la ingeniería aeroespacial: una reentrada hipersónica a la atmósfera terrestre. Después de completar una misión de prueba, aterrizó de manera controlada en el océano Índico, demostrando su resistencia y capacidad para futuras misiones interplanetarias. Este hito representa un avance crucial para el programa Marte de SpaceX.
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