Las máquinas sin descanso en Cipolletti: desmantelan un tercer aguantadero

Un nuevo operativo de seguridad y limpieza se llevó adelante en Cipolletti. Personal municipal, con el respaldo de efectivos de la Policía de Río Negro, trabaja en el desmantelamiento de un tercer aguantadero, esta vez ubicado en un terreno baldío en la intersección de las calles Venezuela y Villegas, en el barrio Almirante Brown.

Se trata de una propiedad abandonada y sin mantenimiento, que en los últimos tiempos se había transformado en un espacio de refugio para personas vinculadas a actividades delictivas. Según información preliminar, el lugar era utilizado para ocultarse tras cometer robos y para el consumo de estupefacientes. Vecinos de la zona venían alertando sobre movimientos extraños y reiteradas situaciones de inseguridad, lo que derivó en la intervención de las autoridades.

Desde primeras horas de la mañana, máquinas municipales ingresaron al terreno para iniciar los trabajos de limpieza y demolición de estructuras precarias, mientras que la Policía brindó seguridad en el perímetro para evitar incidentes.

Este es el tercer aguantadero desactivado por el Municipio en lo que va de la semana, en el marco de un plan integral de recuperación del espacio urbano, prevención del delito y fortalecimiento de la seguridad en los barrios.

Una semana intensa

El primer operativo se realizó el martes en el barrio Luis Piedrabuena, en la esquina de Brasil y Pastor Bowdler, donde se derribó una casa ocupada ilegalmente. Según los vecinos, el lugar era un foco constante de robos, consumo de drogas y violencia. "Este lugar funcionaba como un aguantadero hace más de 8 años, tenía gente conflictiva. Robaban y se acobachaban ahí, mucho consumo de alcohol y droga”, relató Beatriz, vecina del barrio, en diálogo con LM Cipolletti. “El barrio se volvió inseguro por esto, todos vivimos enrejados. En verano no nos dejaban dormir. Ahora vamos a tener más tranquilidad, aunque el barrio sigue siendo inseguro”, mencionó.

El segundo procedimiento fue el miércoles en el barrio Almirante Brown, sobre las calles Juan Manuel de Rosas y Lavalle, en un terreno usurpado hace más de una década. Allí se encontraron elementos robados, personas con antecedentes y rastros de venta de estupefacientes. Más de 30 efectivos policiales acompañaron las tareas de demolición y limpieza, y se avanzó con controles de antecedentes a quienes se encontraban en el lugar.

Ambos operativos forman parte del compromiso del Municipio con el ordenamiento urbano y la seguridad pública. El intendente Rodrigo Buteler aseguró que “en Cipolletti no hay lugar para los delincuentes” e invitó a los vecinos a realizar denuncias anónimas para detectar nuevos espacios ocupados ilegalmente.

Los operativos no los pagan los vecinos, sí el infractor

Las iniciativas, que ya son parte de una política pública en Cipolletti, se rige bajo la ordenanza vigente 469/22, que establece que los dueños de terrenos baldíos deben mantenerlos limpios y cercados. La maleza debe cortarse al menos una vez por mes, a fin de evitar la proliferación de insectos, microbasurales, incendios o situaciones de inseguridad.

Quienes incumplan en esta normativa, las multas pueden llegar hasta los 2.500 SAM (Sanciones Administrativas Municipales), lo que equivale actualmente a $2.312.500. Además, se le suman los costos del acta contravencional y la limpieza realizada por el Municipio que se traslada a las tasas municipales del contribuyente infractor.

Para continuar con esta tarea en toda la ciudad, los vecinos pueden denunciar de forma anónima a la central 147 o 109 para que el Municipio comience las labores de denuncia y posterior actuación.