Rescataron a un nene que quedó colgado de un octavo piso

Un dramático rescate tuvo lugar este viernes en la ciudad de Rosario, donde un nene de 11 años pasó la baranda y la red de contención en el balcón de su departamento y quedó colgando desde el octavo piso del edifico. Tras minutos de desesperación, su hermano y vecinos lograron salvarlo de caer al vacío.

El hecho sucedió este jueves cerca del mediodía en una vivienda ubicada en la intersección de las calles Pellegrini y Corrientes, según confirmaron fuentes policiales. Los vecinos de la zona se convirtieron en espectadores de una desesperante escena que fue captada por los transeúntes en diferentes videos que luego se viralizaron en las redes sociales.

En las grabaciones se ve a un menor sujetándose de la malla de protección ubicada en uno de los balcones más altos del edificio. De acuerdo a la información consignada en medios locales, se trata de un chico de 11 años que padece autismo y que había logrado romper la red, quedando atrapado del otro lado con alto riesgo de caer al vacío.

El episodio fue alertado por su hermano mayor, que lo vio desde adentro de la casa y rápidamente salió a asistirlo. Sin embargo, no podía hacer más que sujetarlo, ya que cualquier otra maniobra que hiciera podía desestabilizar al niño y provocar la caída.

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El menor de 11 años quedó colgando desde el octavo piso.

Desde la vereda, un grupo de personas ya se había concentrado en la zona para ver que ocurría. La mayoría se encontraba en estado de shock y no reaccionaba ante el incidente. A diferencia de dos repartidores de cerveza que, frente a la situación, frenaron el camión en el que se estaban trasladando para trabajar y sin dudarlo se bajaron a ayudar.

En algunos minutos, ambos ingresaron al edificio, subieron al octavo piso y comenzaron a golpear todas las puertas hasta dar con la del departamento en el que estaba ocurriendo el accidente. Como el hermano de la víctima estaba sosteniéndolo, nadie podía abrir. “Golpeábamos la puerta y nadie salía a abrir, así que la rompimos. No nos importaba nada porque pensábamos que podía ser nuestro hijo”, explicó Rodrigo, uno de los hombres que socorrió al niño, a El Tres.

Tras romper la puerta de ingreso, se ubicaron en el balcón superior. Fue así que uno de los repartidores se puso cabeza abajo y estiró los brazos con ayuda del compañero y lograron poner a salvo al pequeño, mientras al lugar llegaban Bomberos Zapadores y Voluntarios.

En 2018 ocurrió una situación idéntica, en el mismo edificio y en un octavo piso. En ese entonces se trató de un nene de 8 años, quien también tuvo que ser rescatado por vecinos.