El ácido comentario contra Boca de Nicolás Orsini, tras salir campeón con Platense

El fútbol siempre da revancha, y pocas veces esa frase suena tan real como en la historia de Nicolás Orsini. Este fin de semana, Platense escribió una de las páginas más emotivas de su centenaria historia al consagrarse campeón del fútbol argentino por primera vez.

El título conseguido tras vencer a Huracán por 1-0 en Santiago del Estero no solo representa un hito institucional para el Calamar, sino también la culminación de un camino de resiliencia para muchos de sus protagonistas. Entre ellos, el delantero que supo estar marginado en Boca y que encontró en Vicente López un espacio de contención, redención y gloria.

La fuerte frase de Nicolás Orsini contra Boca

"Este es el grupo de las oportunidades", dijo Orsini conmovido ante las cámaras de ESPN, en plena celebración. Y no fue una frase casual: sintetizó el espíritu de un equipo que supo reconstruirse desde el margen, con nombres que en otros clubes quedaron relegados, pero que en Platense encontraron un nuevo comienzo. “Platense nos abrió la puerta a muchos que nos tocó comer mie... en otros lugares en todo este tiempo. Antes de venir acá, estaba corriendo alrededor de la cancha en Boca”, lanzó sin filtro, con una mezcla de alivio y emoción que se notaba en cada palabra.

Orsini, que tuvo pasos por Lanús, Unión y Boca, fue protagonista clave en la campaña. Su aparición más recordada fue en el primer cruce de eliminación directa, cuando marcó el gol que dejó fuera a Racing en el Cilindro de Avellaneda, a pocos minutos del final. Ese tanto significó más que una clasificación: fue el primer paso firme de un equipo que, sin nombres rutilantes pero con carácter, se animó a competir de igual a igual contra gigantes como San Lorenzo y River.

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Nicolás Orsini

El gran éxito de Platense que lo llevó a ser campeón

La dupla técnica conformada por Favio Orsi y Sergio Gómez supo canalizar ese espíritu combativo y construir un plantel sólido, con fuerte sentido colectivo. Lejos de depender de individualidades, Platense basó su campaña en la unidad y en la convicción. “El equipo demostró carácter, templanza y se merece este título. Se lo dedico a la gente que estuvo apoyando en las buenas y en las malas”, agregó Orsini en medio de los festejos.

Para el delantero, esta conquista representa mucho más que una medalla. Es el cierre simbólico de una etapa dura y solitaria. Aquel tiempo en el que quedó al margen del plantel profesional en Boca, entrenando en soledad mientras se resolvía su salida, quedó atrás. Pasó del silencio y la frustración a levantar una copa con sus compañeros, abrazado por una hinchada que lo adoptó como uno de los suyos.