Pity Martínez y su cruce con Miguel Borja por patear un penal

En el contundente triunfo de River Plate por 4-0 frente a Rosario Central, no todo fue celebración. En los minutos finales del encuentro, una escena peculiar capturó la atención de los hinchas en el estadio Monumental y de los fanáticos del fútbol: el Pity Martínez y Miguel Borja protagonizaron un tenso intercambio para decidir quién ejecutaría el penal sancionado tras una falta sobre Manuel Lanzini.

El árbitro Yael Falcón Pérez había señalado la pena máxima, y de inmediato tanto el Pity Martínez como Borja se dirigieron hacia el punto del penal, cada uno con la firme intención de ser el encargado del disparo. Con una pelota bajo el brazo, Martínez dejó clara su postura: “Voy a patear, Miguel”, dijo con firmeza, dejando ver su decisión de asumir la responsabilidad en un momento tan especial para él.

El conflicto entre el Pity Martínez y Miguel Borja

El regreso del Pity Martínez a las redes con la camiseta de River después de un año era un contexto que hacía de este penal algo más que una simple jugada. Tras casi diez meses fuera de las canchas debido a una lesión ligamentaria en su rodilla izquierda, el mediocampista buscaba cerrar el partido con un gol que simbolizara su recuperación y su contribución al equipo.

Miguel Borja, por su parte, también tenía razones para querer ejecutar el penal. En un semestre donde su rendimiento había sido cuestionado, cada gol contaba para reafirmar su lugar en el plantel y demostrar su capacidad goleadora.

La situación generó tensión en el área. Aunque el colombiano insistía en ser el ejecutante, varios compañeros, incluidos Marcos Acuña y Manuel Lanzini, intervinieron para convencerlo de que cediera el tiro. La ovación de los hinchas hacia el Pity terminó inclinando la balanza, y Borja, visiblemente molesto, dio un paso al costado con un gesto de fastidio, aunque finalmente mostró su apoyo al mendocino con una palmada en la cabeza.

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Pity Martínez cambió el penal por gol

El gol del Pity Martínez frente a Rosario Central

El Pity no decepcionó. Con su característica personalidad, ejecutó el disparo de forma precisa, engañando al arquero Jorge “Fatura” Broun y cerrando la goleada con su gol. Tras convertir, Martínez agradeció públicamente el gesto de Borja: “Uno siempre trata de que Miguel haga goles. Esta vez fui yo quien pidió el penal porque lo necesitaba, y él tuvo la amabilidad de dejarme patear”.

El episodio recordó un hecho ocurrido en febrero de este año, cuando Borja tuvo una disputa similar con Esequiel Barco en un partido contra Atlético Tucumán. En esa ocasión, Barco insistió en ejecutar un penal, erró dos veces tras una repetición por adelantamiento del arquero, y Martín Demichelis, entonces técnico de River, lo reemplazó en el entretiempo.