Ante una posible nueva fuga, el padre abusador quedó tras las rejas

El padre abusador de Centenario que se fugó y luego se entregó en Junín de los Andes al ser cercado por la Policía, quedó detenido en prisión preventiva. Así se dispuso por pedido de la fiscalía para evitar una nueva fuga.

Cabe recordar que con la difusión generada y los investigadores pisándole los talones, el padre abusador se entregó este jueves en Junín de los Andes. Quedó detenido alojado en la comisaría y a disposición de la fiscalía interviniente y este viernes la fiscal del caso, Silvia Moreira, requirió una audiencia urgente el viernes por la mañana para pedir la pena a imponerle por los delitos cometidos, algo que no se había podido hacer a raíz de su fuga.

Durante la audiencia, Moreira pidió 12 años de prisión para el padre abusador y detalló los agravantes mediante los cuales arribó al monto de condena requerido. La defensa también fundamentó su pedido, por una pena menor.

Los jueces del tribunal encargado de fijar la pena acordaron dar su veredicto el próximo martes. No obstante, restaba aún discutir la libertad del hombre, que a criterio de la acusación, no podía mantenerse por el riesgo de fuga.

Es por esto que en horas del mediodía se realizó una nueva audiencia, en la que la fiscal Moreira resaltó que desde el 16 de mayo hasta el martes pasado, el condenado venía cumpliendo una prisión domiciliaria, con un permiso especial para trabajar, y siempre se había presentado a las audiencias. Pero cuando debía discutirse el monto de la pena, se ausentó. Ello llevó a su búsqueda y posterior entrega voluntaria al verse cercado.

Dando el peligro de fuga como acreditado, Moreira pidió que se le impongan al abusador seis meses de prisión preventiva. La querellante institucional en representación de la víctima adhirió a la solicitud.

Tras escuchar a las partes, la jueza a cargo de la audiencia hizo lugar a todos los pedidos de la fiscal.

El caso

El hombre fue condenado en mayo de este año por un jurado popular y días atrás se lo esperaba en una audiencia para realizar el juicio de cesura, pero no se presentó. Es que cumplía una prisión domiciliaria con permisos para ir a trabajar.

Ante esto, la Justicia dictó su rebeldía y un pedido de captura internacional que se calificó como alerta roja, ya que se estimaba que podría huir a Chile, debido a que el condenado nació en ese país, por lo que existía la posibilidad de que intente cruzar clandestinamente a ese país y así eludir la condena.

El hombre -identificado solo como C.E.S.M para proteger la identidad de la víctima que es descendiente directa suya- fue condenado en mayo de este año por un jurado popular como autor de los delitos de abuso sexual con acceso carnal –continuado- agravado por haber sido cometido por un ascendiente, por haber causado un grave daño en la salud mental de la niña y por haber sido cometido contra una menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia preexistente, en concurso real con corrupción de menores.

La fiscalía logró probar en juicio que las aberrantes violaciones cometidas contra su hija tuvieron lugar en fechas indeterminadas, pero en un período comprendido entre febrero de 2016 y septiembre del 2021, cuando el hombre abusaba de la niña en una vivienda de Centenario.

Además, el abusador hoy condenado "promovió en la niña prácticas sexuales que importan una alteración en su sexualidad" al exhibirle videos pornográficos.