A dos días de la gran fuga

En la columna de la semana pasada recordé el malestar que se vivía en la vieja cárcel de Neuquén en 1916, a partir de la llegada de un grupo de presos proveniente de La Pampa que terminó de agravar las precarias condiciones que había en ese presidio con la superpoblación de internos.

El plan de escape se venía gestando con tiempo. Había un plan para tomar la estación del ferrocarril y huir en tren hacia el oeste, además de asaltar el Banco Nación y otra serie de actividades delictivas que les permitieran a los fugados un escape seguro, aunque esa estrategia resultó positiva a medias.

Como se sabe los presos lograron la fuga, aunque la gran mayoría fue recapturada en las primeras horas. Solo un grupo logró avanzar con rumbo a la cordillera dejando detrás un enorme rastro de sangre.

El martes se cumplen 107 años de aquel escape que fue un punto de inflexión en la historia del territorio de Neuquén y que causó una gran conmoción en todo el país. Los principales medios nacionales le dieron una amplia cobertura al hecho. En particular, la revista Caras y Caretas publicó varias páginas informando detalles de la fuga y del asesinato del ingeniero Adolfo Plottier, una de las víctimas de aquella revuelta.

Los archivos de aquellas publicaciones volvieron a ver la luz a raíz de que la Biblioteca Nacional de España digitalizó todos los números de la revista y los puso a disposición de todos aquellos interesados en la historia.

Este 23 de mayo, LMNeuquén publicará un completo informe de aquella dramática cobertura. Vale la pena leerlo.