"No alcanza para nada", dijeron indignados los trabajadores del municipio afectados. Están de paro y reclaman el pase a planta permanente.
Trabajadores municipales de Loncopué iniciaron, el pasado viernes, medidas de fuerza en reclamo del pase a planta, recategorizaciones y una actualización del refrigerio que cobran y es "un chiste".
Desde este lunes, muchos adhirieron a un paro por tiempo indeterminado y directamente no fueron a trabajar, por lo que varios servicios básicos están comprometidos. Desde la seccional de ATE Loncopué, aseveraron que el acatamiento es del 80% sobre el plantel general, que asciende a los 600 empleados aproximadamente, entre contratados y de planta permanente.
En diálogo con LMNeuquén, Luis Huenten, secretario general de ATE Loncopué, advirtió que el intendente de la localidad (Daniel Soto), por ahora, no dio una respuesta positiva a la serie de reclamos que presentaron. "Dice que no tiene plata, pero tampoco gestiona", comentó.
Según sus dichos, varios empleados que trabajan como contratados hace 8 y 10 años también ya estarían en condiciones de ingresar a la planta permanente, y es lo que corresponde. No obstante, el municipio no hace lugar. "Ojalá que haya una respuesta positiva, ya que los compañeros, aparte de cobrar poco, necesitan pasar a planta para poder jubilarse con una categoría buena", señaló Huenten.
No hay certezas de que haya un pase a planta permanente este 2025, mientras el municipio sostiene la vinculación laboral con alrededor de 250 contratados. Asimismo, los que ya están adentro de la estructura pujan por una recategorización que mejore su situación salarial y laboral. En cualquier caso, se trata de sueldos precarios, algunos de los cuales están por debajo de la canasta básica familiar.
En promedio, el trabajador del gremio indicó que un contratado cobra $600.000. En tanto, agregó, uno de planta con categoría básica recibe $760.000 u $800.000. El que llega a la categoría más alta, alrededor de $1.200.000.
Son $700 al mes
Por otro lado, reclaman que el municipio actualice la partida mensual que reciben los empleados por estatuto para el refrigerio, que -según denunciaron- está en $700. "Pedimos que se pague el 10% de la categoría 24, es decir, 24.000 pesos al mes", comentó. No fue actualizada la administración municipal anterior; y la actual, tampoco lo hizo hasta el momento. "Son $700 en total, y con eso no comprás ni una tira de pan", señaló.
En este contexto, aseveró que sostendrán el paro de actividades, con alguna manifestación pública en las calles para "hacer ruido".
Los servicios resentidos por esta medida, son: recolección de residuos; la actividad del matadero que provee la carne a los frigoríficos; mantenimiento de escuelas, área Turismo, Obras Públicas y red cloacal.
Mientras tanto, crece el malestar y la incertidumbre en un pueblo del interior neuquino que tiene más de 6 mil habitantes y un municipio de segunda categoría, donde no es menor la cantidad de familias que viven de forma directa o indirecta del Estado.
En enero de 2024, los empleados municipales salieron a la calle por 149 contratos que había dado de baja el actual intendente, del espacio Comunidad. Entonces, el jefe comunal les dio la misma respuesta que ahora: "No hay plata". A un año y medio de gestión, el escenario parece ser el mismo.
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