El ex sargento contó que como policía federal en Neuquén llegó a detener a 600 personas en solo tres meses.
En la entrevista que brindó a LMNeuquén, el ex sargento y árbitro de fútbol Carlos Escobar contó que en sus inicios como policía federal en Neuquén llevó presas alrededor de 600 personas en solo tres meses. Comentó que encabezaba entre dos y tres allanamientos por día y que la mayoría de las detenciones era por consumo, por cómplices y averiguación de antecedentes.
Si hubo un momento bisagra en la historia del básquet del Club Independiente fue cuando incorporó a Jim Ratiff, un jugador estadounidense que, con sus 2,06 metros y sus volcadas, causó sensación en los neuquinos. El basquetbolista, que participó en un draft de la NBA, tuvo una mala pasada con Escobar.
“Lo detuve en el Coli Bar, un lugar que estaba de moda en los ’80 y que se ubicaba en Yirigoyen casi Juan B. Justo. Lo vi fumando a él y a varios más. Era todo libre porque no se escondían mucho, porque fumaban en las mesas, barra. Estaba recorriendo la ciudad y cuando lo vi entré y lo detuve. Después fuimos a su departamento de la Galería Jardín y le encontramos más cigarrillos de marihuana. Hasta al dueño del bar lo llevé preso. Ahora está permitido el consumo, pero antes tenías un solo porro, tuca (resto del cigarrillo) o semillas e ibas preso. Hoy se siente el olor de marihuana en cualquier lado y no pasa nada”.
En cuanto al tiempo al que una persona quedaba detenida, el ex árbitro detalló que todo dependía del delito que se cometía: “Por ahí a la persona le cabía un mes de detención, depende… por consumo podías llegar a estar 15 días, una semana o por tenencia quedabas en prisión preventiva. También tenía que ver con la cantidad de droga que se secuestraba porque si eras traficante ya era otra cosa”, explicó.
Las escuchas telefónicas
Por otro lado, en cuanto a las escuchas telefónicas que se hacían en la década del '80, Escobar contó que se subía a los postes de luz para acceder a las cajas telefónicas. Luego, la compañía le indicaba a la línea que debía conectarse ("pinchar") para acceder a las escuchas mediante auriculares. Con el avance de las tecnologías, las intervenciones en las líneas pasaron a grabarse y de esa forma se agilizó el proceso de investigación.
Según el ex efectivo de la fuerza de seguridad pública, la invasión de la cocaína en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén se dio en el inicio de los '90. "Comenzó hacerse fuerte el consumo y también empezó a verse otro tipo de droga como ácido lisérgico, el famoso LSD 25. En menor escala, también apareció la heroína", detalló.
"Yo cuando entre a la Federal e hice el primer procedimiento de drogas dije 'chau, si secuestro un kilo de marihuana por semana, que serían 4kg por mes y a la vez 48 por año, pensé que no debería quedar más droga en el país. Lo mío lo había multiplicado por las cinco brigadas. Un boludo... pero bueno. Evidentemente hoy es muchísimo el consumo y entran por todos lados. Hay muchos factores", reflexionó Carlos Escobar sobre la lucha que sostenía contra los narcos.
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