Reflexionar sobre la identidad de Neuquén es un buen punto de partida

El sábado se conmemoró por primera vez el Día de la Identidad Neuquina, en homenaje a Marcelo Berbel, el cantautor y poeta de Neuquén que nació un 19 de abril de 1925. Y fue inevitable el tema de conversación y debate entre amigos y colegas sobre el significado de estas dos palabras más allá de que la respuesta es simple: lo que nos identifica.

Hubo opiniones diversas, pero todas estaban orientadas hacia un mismo camino. La identidad neuquina es algo que se construye con personajes, lugares característicos, hechos importantes a lo largo de la historia, culturas y acciones que tiene una comunidad.

Sin embargo, es difícil establecer una identidad única que abarque a toda la provincia de Neuquén, por las características propias que tiene cada región. En ellas aparecen pequeñas ramas de identidades de cada ciudad y de cada pueblo de las cuales también se desprenden otras en sectores y barrios que también encierran sus propias afinidades.

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Distinta es la identidad de los neuquinos capitalinos que la de quienes viven en el norte neuquino, en el centro de la provincia o en el sur porque distintos son sus personajes.

Puntos de encuentro sobre la identidad de Neuquén

Sí es posible establecer o ponerse de acuerdo en los puntos en común que tiene cada rincón del territorio que nos identifica como provincia. Es indiscutible citar a los dos ríos más importantes, el Neuquén y el Limay, como las araucarias, los pueblos originarios, el Lanín, el Domuyo, el Salto del Agrio, el petróleo, los dinosaurios, hechos históricos que marcaron un punto inflexión y personajes representativos de cada ciudad.

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Creo que Marcelo Berbel fue bien elegido para encontrar ese equilibrio sin caer en localismos. Él le escribió y le cantó al hombre de ciudad, pero también al paisano, al mapuche y al tehuelche, e igualmente se inspiró en el sur cordillerano y en el norte, en la cultura del piñón y del arriero y hasta en la capital que lo cobijó hasta su muerte.

Los versos y canciones de este paisano poeta trascendieron las fronteras de Neuquén hace tiempo. Solo por eso, es bien merecido el homenaje. Y también por eso, es valioso tomar esta fecha como punto de partida para comenzar a analizar, pensar y debatir lo que significa la identidad neuquina o, mejor dicho, lo que nos identifica a todos los que elegimos y habitamos esta querida provincia.