El 87% de los pacientes graves de coronavirus recuperados mantiene síntomas

Una investigación del Departamento de Geriatría del Policlínico Universitario Agostino Gemelli de Roma, Italia, centró sus estudios en las secuelas que experimentan los pacientes graves recuperados del COVID-19 y reveló que el 87% de ellos padecen la persistencia de síntomas tras sanarse.

Para trabajar sobre el objetivo propuesto, la Fondazione Policlinico Universitario Agostino Gemelli estableció un servicio ambulatorio postagudo para individuos dados de alta del hospital después de recuperarse de la enfermedad pandémica. Todos los pacientes que fueron incluidos cumplieron con los criterios de la Organización Mundial de la Salud para la interrupción de la cuarentena: no tener fiebre durante tres días consecutivos, mejoría en otros síntomas y dos resultados negativos de las pruebas para el coronavirus con 24 horas de diferencia. A ellos se les ofreció una evaluación médica integral con antecedentes detallados y examen físico. Los datos sobre todas las características clínicas se reunieron en un sistema electrónico estructurado de recopilación de datos. También, se les pidió a los voluntarios que contaran retrospectivamente la presencia o ausencia de síntomas durante la fase aguda de COVID-19 y si cada síntoma persistía en el momento de la visita.

La edad media de los examinados fue de 56,5 años y durante la hospitalización, el 72,7% de los participantes tenía evidencia de neumonía intersticial. Los sujetos fueron evaluados una media de 60,3 días después del inicio del primer síntoma COVID-19 y en el momento de análisis, solo 18 estuvieron completamente libres de cualquier síntoma relacionado con COVID-19. Por su parte, el 32% tenía uno o dos síntomas mientras que el 55% mantenía tres o más.

Ninguno de los pacientes continuó presentando fiebre o algún signo de enfermedad aguda. A su vez, se observó una peor calidad de vida entre el 44,1% de los pacientes. Una alta proporción de individuos informó fatiga (53,1%), disnea (43,4%), dolor en las articulaciones (27,3%) y dolor en el pecho (21,7%).