El estudio reveló escalofriantes detalles del presunto líder del narcotráfico - acusado de ordenar el triple femicidio de Florencio Varela - que podrían explicar su brutal accionar.
Tony Janzen Valverde Victoriano, alias "Pequeño J", principal sospechoso de ordenar el brutal triple femicidio en Florencio Varela, no solo es un líder narco, sino que los especialistas advierten que su mente presenta un patrón de alto riesgo y antisocial.
Tras su detención en Perú cuando iba escondido en un camión, un informe psicológico de los médicos forenses de ese país reveló el escalofriante perfil psicológico del criminal, arrojando luz sobre su capacidad para la violencia extrema.
Según los especialistas, el joven de 20 años mostró tendencias a rasgos psicopáticos/antisociales, rasgos narcisistas, agresividad y capacidad de manipulación.
Pequeño J, un líder antisocial y que no mide las consecuencias de sus actos
El examen pericial subraya un dato clave sobre el desarrollo de su brutalidad: su agresividad se consolidó al crecer "viendo violencia como método válido de resolución de conflictos y consolidación de liderazgo".
Esta conclusión sugiere que, para "Pequeño J", la violencia no es solo un último recurso, sino una herramienta fundamental para mantener el control y el poder dentro de su organización delictiva. El estudio también advierte sobre la dificultad de establecer vínculos afectivos genuinos, así como una tendencia a la impulsividad y a actuar sin medir las consecuencias de sus actos.
Valverde Victoriano es descrito como un líder antisocial, capaz de ejercer control sobre otros mediante el miedo y la violencia, sin mostrar remordimiento alguno por las consecuencias de sus decisiones. Estas conclusiones coinciden con la hipótesis de la Justicia, que lo señala como el autor intelectual de los asesinatos de Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15).
¿A quién rinde cuentas el sospechoso de ser el autor intelectual del triple femicidio?
El ministro de Seguridad de provincia de Buenos Aires, Javier Alonso, brindó detalles sobre el procedimiento que llevó a la detención de "Pequeño J" y Matías Ozorio en Lima, Perú. Se trata de los principales sospechosos del triple femicidio en Florencio Varela.
Respecto a la salida del país de Pequeño J, el funcionario confirmó que ocurrió el viernes. Fue así que siguieron la ruta que tomó para escaparse. "Salió por el norte hacia Bolivia, donde perdimos la cooperación. A partir de la cooperación la policía de Perú, le suministramos el teléfono a ellos de Ozorio y de Pequeño J y ellos empezaron a rastrearlos en el Perú", comentó.
Sobre si hay alguien más arriba del joven peruano, diversas personas declararon en la causa y suministraron a las fuerzas policiales dos nombres: "Papá" y "Abuelo". "Son ante quienes rendían cuentas Pequeño J", dijo el ministro de Seguridad.
Alonso deslizó que él estaría vinculado a algunas organizaciones que se dedican a la logística, para traer la droga desde los países productores a la Argentina.
"Espero que a partir de la detención más gente quiera hablar ante la Fiscalía", pidió. A su vez, calificó al joven peruano como "sadomasoquista", luego del testimonio de diversas personas que tuvieron contacto con él.
"Creo que Pequeño J tuvo que rendir cuentas ante sus superiores y utilizó los cuerpos de estas chicas para dar un mensaje a sus subalternos, a las bandas opositoras y a sus superiores", dijo.
Te puede interesar...
Dejá tu comentario