En el operativo, llevado a cabo en Pensilvania, otros dos agentes resultaron heridos, mientras que el atacante fue abatido.
Tres policías fueron asesinados en el condado de York, Pensilvania, tras ser baleados cuando intentaban cumplir con una orden de detención. El tirador murió en el lugar donde se produjo el hecho.
El enfrentamiento armado, específicamente, ocurrió el miércoles en el pequeño municipio de North Codorus, en el noreste de Estados Unidos, en medio de un operativo que movilizó a numerosas unidades de seguridad y de emergencia.
Los policías se acercaron al lugar para llevar a cabo un procedimiento judicial que incluía la detención de un sospechoso. Pero la situación se complicó cuando fueron recibidos con disparos.
Ante ese panorama de violencia, la situación derivó en un tiroteo que terminó de manera trágica: tres oficiales perdieron la vida y otros dos resultaron heridos de gravedad.
Según informó la Oficina de Gestión de Emergencias del condado, a las 2.10 de la tarde el servicio 911 recibió múltiples llamadas que advertían sobre un “incidente policial” en aquel sitio.
La alerta derivó en un amplio operativo, con la llegada de móviles policiales, unidades especiales y personal médico de emergencia.
Los dos oficiales agentes fueron trasladados al hospital WellSpan, donde permanecían internados en estado crítico, aunque estables según informaron los voceros médicos.
Fuentes oficiales confirmaron que el atacante murió en el lugar, lo que permitió descartar la existencia de una amenaza activa para la comunidad.
La confirmación oficial sobre la muerte de los policías
El coronel Christopher L. Paris, comisionado de la Policía Estatal de Pensilvania, confirmó que “cinco agentes del orden recibieron disparos hoy: tres de ellos mortales y dos que fueron trasladados a WellSpan en York”.
“Se encuentran en estado crítico, pero estable”, detalló Paris, quien se excusó de entregar más detalles sobre el caso porque no podía dar a conocer, al menos por el momento, a qué departamentos pertenecían los oficiales fallecidos ni los heridos.
En paralelo, reveló que “hay muchos detalles que los funcionarios no están dispuestos a revelar, dada la naturaleza en curso de la investigación”.
Una ardua investigación para encontrar las razones del ataque
Un grupo de peritos y equipos de investigación criminal trabajaron durante horas en la escena del tiroteo. La zona estuvo delimitada para efectuar pericias balísticas y otros examenes. Las autoridades también entrevistaron testigos, con el fin de reconstruir la secuencia que culminó en los disparos.
En paralelo, los investigadores buscan determinar si el atacante actuó solo o si contaba con apoyo. Hasta el momento, las autoridades solo confirmaron que el sospechoso murió en el lugar, sin brindar mayores detalles sobre su identidad o antecedentes.
Qué dijeron las autoridades de Pensilvania
El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, señaló que después de ser informado sobre esta situación decidió acercarse al lugar del hecho en el municipio de North Codorus. “Les pedimos a quienes se encuentren en la zona que sigan las instrucciones de las fuerzas del orden locales y @PAStatePolice”, manifestó el funcionario.
Por su lado, el vicegobernador, Austin Davis, también utilizó la red social X para enviar un mensaje. “Por favor, envíen sus oraciones a los oficiales y a las personas involucradas en el tiroteo en el condado de York. A medida que sepamos más, sigan todas las indicaciones de la policía y manténganse alejados de la zona”, suplicó.
En tanto, el fiscal general de Pensilvania, Dave Sunday, expresó su preocupación en la misma plataforma. “Estoy al tanto de la situación actual en el condado de York. Insto a todos los residentes a seguir las instrucciones de la policía local. Estoy en camino al área y estoy rezando por todos los involucrados”, escribió.
El episodio está bajo investigación y al menos hasta la mañana de este jueves no habían trascendido las causas del atacante para abrir fuego sobre los policías.
Te puede interesar...
Dejá tu comentario