Recorrían el país sacando fotos y en Río Negro les robaron todo

Viajaron por el país cumpliendo un sueño durante dos años. Un día se subieron al motorhome y salieron a retratar paisajes de Argentina con un drone y equipo profesional de fotografía. Sin embargo, el viaje quedó trunco en Río Negro, cuando la pareja llegó a un mirador en el que le robaron todo.

Paula Streppone y Claudio López estaban de visita en Bariloche cuando desconocidos forzaron las ventanas de la camioneta convertida en casilla rodante y se llevaron todas sus cámaras. Paula dijo que aún tienen "la esperanza de que alguien" reciba el ofrecimiento de los equipos y así poder recuperarlos.

La viajera dijo que junto a su pareja trabajan en la creación de contenidos, por lo que en este recorrido las imágenes de distintos paisajes del país les servía como recreación, pero también como trabajo. “Hacemos fotos de todos los lugares que nos vamos acercando y trabajamos también para otras marcas”, agregó.

Paula contó que entre las pertenencias que les robaron se encuentra un drone DJI Air2, una cámara Canon 7D con dos lentes, un Sigma 24-35, otro que era un Canon 70-300. El valor de los equipos varía en el mercado según la antigüedad y el uso -las cámaras se tasan en función de la cantidad de disparos-, pero en el mejor de los casos, reponer la cámara, los lentes y el drone costaría un par de millones.

“Era nuestro equipito con el que habíamos soñado hacer nuestro estudio de fotografía cuando mutó la vida a este viaje que este año cumplimos dos años”, lamentó.

Ante esta situación Paula apeló a la buena voluntad de los barilochenses para aportar algún dato. En redes sociales se la puede encontrar como @paulistreppone o @modoviajerandom. También se pueden buscar las redes para ver su trabajo, bajo el nombre modo viaje random. “Ahí nos pueden escribir y bueno, estamos todo el tiempo ahí, mirando y contestando mensajitos”, concluyó.

Venden a precio bajo después del robo

Los ladrones suelen deshacerse tan rápido como pueden de elementos de electrónica, cámaras o bicicletas. En su afán de convertir en plata lo que robaron, suelen pedir precios muy bajos por los productos. Un ejemplo de ello fue un ladrón valletano que pidió apenas 10 mil pesos por una computadora y por eso terminó preso.

Ocurrió en Villa Regina, cuando a un hombre le ofrecieron una computadora por 10 mil pesos en la puerta de su casa. Sospechó que era robada y la compró para devolverla al dueño. Cuando la tuvo en sus manos descubrió que pertenecía a un centro de salud.

La descripción que realizó el comprador de la computadora permitió identificar al delincuente en forma más clara que por las imágenes de las cámaras de seguridad. Así, lograron detenerlo y enfrenta una causa por el robo. El caso podría contar como agravante que en la computadora había 3000 historias clínicas y, al vender el equipo, comprometió información personal de todos esos vecinos.

El ladrón también había liquidado a diez mil pesos un televisor, que no fue recuperado por los investigadores.