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La Mañana Pareja

Su pareja le quemó la espalda con café caliente

Un hombre de 42 años fue acusado por la Justicia de haber quemado a su pareja, con quien tienen dos hijos en común. La defensa anticipó otra teoría del ataque.

En medio de la merienda, un día de verano, una mujer fue quemada en su espalda con café caliente que le arrojó su entonces pareja. Así lo relató la fiscalía que lo acusó por el violento hecho, el cual enmarcó en un contexto de violencia de género y según informes "corría riesgo de femicidio". La defensa anticipó que los hechos no sucedieron de esa forma y presentarán pruebas.

En una audiencia de formulación de cargos, realizada el pasado lunes en horas de la mañana, la fiscal Carolina Mauri acusó a un hombre de 42 años por el delito de lesiones leves doblemente calificadas por el vínculo y por ser cometidas con violencia de género.

Al respecto, indicó que el hecho en cuestión tuvo lugar el 20 de febrero de este añño, entre las 17 y las 18, en la vivienda familiar del barrio Limay donde convivía la pareja con sus dos hijos en común, de 3 y 9 años, y la hija de la mujer, de 12 años. "Ese día y a esa hora, sucedió el ataque mientras merendaba la pareja y sus hijos y una enfermera, que estaba a cargo de los cuidados del niño más chico", comenzó el relato la representante de la Fiscalía de Violencia Doméstica y de Género.

"La enfermera se retiró de la sala, el acusado se levantó y se paró junto a la mesada, que estaba de espalda a la señora, lo que impedía que ella observara sus movimientos. Puso a calentar agua en una pava eléctrica y le arrojó café caliente sobre la espalda produciéndole una quemadura", explicó la fiscal sobre la teoría del caso y agregó que producto de ello, la mujer quedó con una lesión de unos 4 centímetros.

En ese momento, la enfermera escuchó los gritos de la víctima y al regresar al comedor, vio que la mujer tenia la ropa mojada y que se le estaba pegando a la piel; por lo que le echó agua fría y le aplicó Platsul, indicó Mauri. Asimismo, la fiscal resaltó que "no fue un hecho aislado, sino que se dio en contexto de violencia de género, principalmente de tipo psicológica, donde el acusado siempre la insultaba y denigraba".

La víctima recién pudo denunciar el violento hecho una vez que pudo irse de la vivienda familiar junto a sus hijos "asistida por los equipos de la Subsecretaría de Mujeres y del 148". Precisamente los informes realizados por estos equipos fueron "los que dieron cuenta que era una situación de Código A con riesgo de femicidio", sostuvo la fiscal Mauri.

También presentó como evidencias, la denuncia de la víctima y entrevistas tomadas a la víctima, la enfermera que estaba presente en la casa ese día, al jefe de enfermeros que coordinaba el trabajo en vivienda y al psiquiatra que entrevistó a la mujer y dio cuenta del contexto previo de violencia.

A su turno, la defensora oficial Laura Giuliani se refirió a la etapa inicial del proceso y que mantuvo una comunicación previa con su asistido, quien le indicó que "tiene prueba para ofrecer y que los hechos no son así como los relató la fiscalía". Sin embargo, "lo cierto es que a esta audiencia no contamos con nada, por lo que no nos queda otra que aceptar los cargos de manera provisoria", expresó la defensora.

Ante la falta de controversia, el juez de garantías Lucas Yancerelli dio por avalados los cargos y fijó en cuatro meses el plazo para culminar la etapa de investigación.

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