La clínica ofrecerá atención veterinaria gratuita a mascotas de personas en situación de vulnerabilidad.
La primera clínica veterinaria social en Italia abrió recientemente sus puertas en Roma, con el objetivo de brindar atención veterinaria gratuita a las mascotasde personas en situación de vulnerabilidad, desde quienes viven en la calle hasta ancianos sin familiares.
Esta iniciativa busca garantizar "el derecho a la salud" también para los animales, asegurando que cada familia, sin importar su situación económica, pueda cuidar de sus mascotas.
Un equipo veterinario al servicio de los más necesitados
El proyecto, liderado por Gianluca Felicetti, presidente de la reconocida asociación de derechos animales LAV, pretende atender a cerca de 400 personas durante su primer año en funcionamiento. Las mascotas recibirán atención médica, medicamentos y, cuando sea necesario, intervenciones quirúrgicas complejas. Si el tratamiento requiere una especialización mayor, la clínica deriva al animal a un centro privado sin costo alguno para el dueño.
La clínica está completamente equipada, contando con quirófano, sala de diagnóstico por imagen y laboratorio para análisis clínicos, todo financiado por los socios de LAV. "Es una muestra de generosidad que permitirá atender a muchas personas", señaló Felicetti, quien confía en extender la iniciativa a otras ciudades de Italia, como Nápoles y Génova, en el futuro.
Un proyecto nacido durante la pandemia
La idea de una clínica veterinaria social surgió durante el confinamiento de 2020, cuando LAV colaboró con la comunidad de San Egidio para ayudar a familias vulnerables. Durante ese periodo, la asociación se encargó de pasear y cuidar a las mascotas de personas mayores y proporcionarles alimentos y medicamentos. Este esfuerzo conjunto despertó la necesidad de crear un centro permanente para la atención de los animales de estas familias, garantizando el bienestar tanto de las personas como de sus mascotas.
Felicetti destacó que esta clínica busca promover el concepto de “salud única para la familia”, abarcando a las mascotas como miembros esenciales del núcleo familiar y velando por su bienestar como parte de la salud integral de sus dueños.
Implicaciones sociales y económicas
La clínica veterinaria también abre un debate sobre el costo de los servicios veterinarios en Italia, donde el IVA del 22% en los cuidados y alimentos para animales los considera bienes de lujo. "Este proyecto es un primer paso, pero necesitamos que las administraciones públicas se impliquen en la creación de clínicas veterinarias sociales”, sostuvo Felicetti. Aunque algunas regiones como Piamonte permiten ya el acceso de mascotas de personas sin recursos a clínicas privadas, el costo sigue siendo alto para muchos, algo que este proyecto aspira a cambiar.
Además de reducir el IVA, LAV espera que esta clínica logre evitar el abandono de mascotas por razones económicas. Con este centro en Roma y su futura expansión, la organización aspira a consolidar un modelo de atención veterinaria accesible para que las familias en situación de vulnerabilidad puedan cuidar a sus animales sin sacrificar su propia estabilidad.
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