El trabajo que le pidieron en la escuela se le complicó y encontró colaboración en el lugar menos pensado: se comunicó a la línea de emergencias y una operadora le dio una mano.
El 911 es un número de emergencias y para casos muy sensibles. En general, los operadores están preparados para dar rápida respuesta y contención a quien decide marcar ese número.
Sin embargo, en la ciudad de Lafayette, Indiana, se dio un caso más que particular: un niño estaba haciendo su tarea de la escuela y no lograba resolverla.
Entonces, llamó a emergencias y se encontró con una operadora, Antonia Bundy, quien lejos cortarle el teléfono, lo escuchó, lo contuvo en el mal momento que atravesaba el chico y más: lo ayudó a hacer la tarea.
Bundy trabaja para el Departamento de Policía de Lafayette y sus superiores la felicitaron por el trato sumamente maternal que tuvo con el niño, quien presentó el llamado con un “tuve un mal día: tengo un montón de tarea”.
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