Biotatuajes para avisarle al médico si no estás bien
Se llaman "Tech Tats", monitorean la salud, reciben y envían datos.
Bío: Entran en la categoría "biowearables": tecnología ponible que interactúa con el cuerpo.
Los creadores los enmarcan en el concepto de "biowearables": tecnología ponible que interactúa con el cuerpo.
El diseñador del hardware de Chaotic Moon, Eric Schneider, considera que se trata de "algo más que un contador de pasos" y que se han enfocado en el uso médico porque en la actualidad ya existen "muchos dispositivos" de monitoreo de la salud, que de todos modos "ocupan mucho espacio".
Si el doctor observase cualquier problema, sería él quien se pondría en contacto con el paciente, según los creadores del dispositivo.
"En lugar de ir al médico a hacerse un chequeo una vez al año, este tatuaje puede ser algo que te pongas en el cuerpo, monitoreará toda la actividad física y la mandará al médico", aventura Scheneider.
Tech Tats no olvida el atractivo de un tatuaje: también permitirá reproducir sencillas animaciones.
Para controlar los "gadgets" móviles
Investigadores del Instituto Max Planck y de la Universidad de Sarre (Alemania) ya habían desarrollado este año un sensor, denominado iSkin, que usa la piel como superficie para controlar los "gadgets" móviles. Se puede colocar en diferentes lugares del cuerpo, parece una calcomanía y, además, puede personalizarse.
"Los científicos actuales manejan componentes rígidos que son muy incómodos de llevar en el cuerpo; limitan las zonas en las que estos dispositivos pueden ser utilizados a la muñeca o la cabeza", señala Martin Weigel, miembro del equipo de investigación. "Nuestro dispositivo es flexible y extensible. Puede cubrir muchos otros lugares, como la parte trasera de la oreja o el antebrazo".
El dispositivo está hecho de silicona y fibra de carbono, y su costo de producción es inferior a un euro aunque utiliza la misma tecnología que la robótica y las prótesis más avanzadas. Incluye sensores de presión que permiten controlar las terminales digitales con sólo tocarse un punto concreto del cuerpo. Según sus creadores, se puede llevar con comodidad y además es estético -tiene la apariencia de un tatuaje- y no supone un riesgo para la salud al estar fabricado con materiales biocompatibles. Los sensores pueden seguir funcionando después de ser doblados o estirados.
Te puede interesar...
Lo más leído
Dejá tu comentario