Desde hace más de 30 años, Nora descifra a través de las cartas el pasado, presente y futuro de la gente.
Desde muy chica percibía cosas. Y su madre quedó asombrada cuando le recordó el enfrentamiento que habían tenido sus progenitores. Lo llamativo de ese breve episodio es que esa niña tenía apenas seis meses cuando ocurrió esa disputa familiar. “Es una características de todos los que manejan el don y la memoria de muy chicos. Veía el aura de la gente. A veces eran claras y otras oscuras. Fui una niña solitaria con pocos amigos que jugaba con los que se dicen supuestos amigos imaginaros”, reveló sin vueltas Nora, tarotista de 59 años que hace más de 30 años se dedicó a la lectura de cartas que se realiza a través de una baraja formada por 78 cartas divididas en Arcanos Mayores y Arcanos Menores.
“Hoy con todo el conocimiento y sabiduría que fui adquiriendo para dedicarme bien a esto vi que eran entidades las que yo veía. Ellas conviven constantemente con nosotros”, comentó la mujer que se radicó en Neuquén en 2002 tras un breve visita a la ciudad en 1997. “Desde chiquita jugaba con la palabra Neuquén y me veía en un pueblo rodeado de montañas y acá estoy”, contó.
Nora desde entonces tiene su hogar en la calle San Martín al 4000 (casi esquina Godoy) en donde atiende a su ardua clientela, que se entrega para saber su pasado, presente y futuro. Arribó desde Berazategui, Buenos Aires, y en su momento cursó la carrera de psicología. Comenzó a tener conocimiento de su don entre los 5 y 6 años cuando sin querer le detectó una enfermedad a una amiga de su mamá.
“Sin querer le apoyé la mano en el vientre y le dije que tenía una mancha algo negra. Mi madrina –como le decía Nora- me pidió que le dibujara lo que veía y le hice una mancha negra. Luego se hizo un estudio y tenía cáncer de útero”, relató Nora, quien está en pareja hace 27 años.
Con ese fuerte suceso sus padres se asustaron y decidieron llevar al psiquiatra a su pequeña hija: “Mis padres pensaron que tenía un problema o una imaginación demasiado grande para la edad que tenía. Recuerdo que me daban Ritalín, que se usaba en la década del 60, que tiene la propiedad de estimular la concentración y reducir la impulsividad”.
Y agregó: “Al bajar el pensamiento cognitivo no se dieron cuenta que elevaron la espiritualidad porque veía más espíritus o como quieran llamarle según la religión”.
Inicio de la fe y sanación
Recién a los 16 años, Nora tiró las pastillas al inodoro y tomó la iniciativa de comenzar a investigar y estudiar qué le pasaba buscando en las bibliotecas la poca información que existía en cuanto al mundo esotérico. “Estudie a los egipcios, las pirámides y también tres años de teología hasta que di con un señor que me enseñó a tirar las cartas y me explicó cuestiones de otras religiones porque todo está muy relacionado. Y en un momento de mi vida me dedique de lleno al tarot. Oriento a la gente en esta desesperación de algunos momentos en los que no saben dónde ir o no encuentra respuesta”, contó la mujer, quien convive con seis gatos. “Son mi protección. Llegué a tener catorce”, lanzó.
“Más allá de la orientación que te puede dar un pedazo de cartón pintado, la respuesta está en el cambio interno de cada persona. Gracias a dios hoy tenemos muchísimas técnicas. Yo trabajo con Diapason (genera equilibrio mental y emocional), energía Schumann, piedras, péndulos y hasta con una pirámide gigante la cual sirve para meditar, además del método Silva, que ayuda a mejorar la concentración, la memoria, la creatividad, el rendimiento académico, el bienestar emocional. Son como siete líneas las que trabajo”, afirmó la tarotista. De todas forma, aclaró: “Siempre hay que tomar esto con pinzas. Es un movimiento energético que se le hace a la persona que le levanta su propia fe y logra sanar sus problemas”.
El tarot es un lenguaje simbólicos que nos ayuda a entendernos mejor a nosotros mismos y comprender que los tiempos de nuestras vidas atraviesan diferentes cualidades y aprendizajes. Nora trabaja con el Tarot Egipcio (consta de dioses y simbologías asociados al antiguo Egipto). Y su correspondiente lectura, a fin de que comprendamos de manera más profunda nuestro subconsciente y nuestra vida; los videntes utilizan la lectura de cartas para hacer las revelaciones sobre el pasado, presente y futuro de la persona, para que le permita solucionar cualquier duda, problema o inquietud con el claro objetivo de conducirlo a una vida mejor.
Cuánto dura la consulta del tarot
“Yo elijo el Tarot Egipcio porque habla de las personas”, resaltó. Cada consulta tiene una duración entre una hora u hora y media. Todo depende de la problemática del individuo para que salga de su estado y sane. La mayoría de los trabajos que hace la pitonisa son de limpieza.
Como en todo ambiente místico o de videncia hay una parte de la sociedad que le tiene mucha desconfianza y poca credibilidad. Ante ese escepticismo, la especialista explicó: “Cuando la persona no encuentra respuesta en otros lados esta es su última opción. Cuando vos a la persona le estás tirando cosas del pasado que ella solo sabe, es el punto en donde comienza a abrirse y creer. Ahí es donde comienza la magia de las cartas. Yo solo armó la mándala pero quien mezcla las cartas es la persona porque me tengo que manejar con la energía de ese individuo”.
La especialista aclaró que las primeras 22 cartas son, justamente, los misterios o secretos ‘mayores’ que brinda el tarot. “El que se quiere meter en este mundo, antes de aprender las cartas, le recomiendo que lea el libro “Magia, ciencia y religión” y “El libro rojo” del médico psiquiatra ( Carl Jung). Habla mucho de la energía y de cómo mantenerse en eje en los peores momentos de tu vida. Y trabajar tu propia energía o fe interna”, se explayó Nora.
La energía del dinero
Quien haya asistido a una lectura de tarot sabrá que es más bien “un diálogo”. Un consultante pregunta, el tarot “responde” y el tarotista descifra, amplía y comunica ese mensaje. En estos tiempos de crisis, Nora contó que la gente que ha llegado en estos últimos tiempos viene porque no les alcanza el dinero, aunque tiene un buen sueldo. “Ante esa situación estamos hablando de carencias. La energía del dinero está muy conectada con una de las energías más bajas que es el chacra sexual o sacro. Si vos tenés carencias afectivas vas a ir a ‘reventar’ la tarjeta al primer shopping que te cruces para cubrir esa falta afectiva. Eso sucede más de lo que uno se imagina”, reveló la vidente.
“Ahora cuando las cartas marcan un trabajo de magia es otra cosa y la lectura se ve desde otro punto de vista. De cada 100 personas que atiendo, seis tienen trabajos hechos”, acotó.
En el caso de Nora, los hombres son los que más acuden a su especialidad. “Están descubriendo mucho su lado femenino; se han puesto más sensibles y emocionales. Están cambiando un patrón repetitivo que es el de macho alfa. Hay cosas que no pueden manejar y recurren a esto para encontrar respuesta de por qué están tan sensibles”.
En ese diálogo con las cartas también se pueden dar los enojos antes revelaciones que el cliente no acepta o no quiere escuchar: “Los enojos que se pueden dar, no es mi problema porque es lo que sale en las cartas. ‘Esto y esto ¿es cierto?’, consulto. ‘Si’, es la respuesta. Entonces para qué te enojas. Si no te gusta la verdad, si querés que te mienta, te miento. Generalmente esto pasa cuando descubrís que la persona tiene una verdad muy oculta y no se dan cuenta que diciendo la verdad te sana. Cuando vos destapas eso atrás viene el enojo”.
“En lo único que le puedo fallar porque nunca lo aprendí bien es en los tiempos, pero a la larga o a la corta se cumple. Los tiempos depende de las personas. No sé qué tiempo tiene la otra persona en hacer las cosas para que se cumpla ese destino que tiene marcado. Por ejemplo, vienen muchas madres a fin de años desesperadas a fin de año porque el hijo se llevó todas las materias. Entonces, le digo qué estuviste haciendo con tu hijo para darle dos alpargatazos para que estudie durante el año”, explicó. “Hago magia, no milagros”, soltó con humor.
No hace amarres
Por otro, sobre los amarres de pareja que hacen las personas para solucionar problemas amorosos o reforzar los sentimientos, la tarotista indicó que no los hace por su forma de pensar. “Sacarse el capricho de la cabeza o tomate un rivotril y búscate otro. Honestamente los trabajos de pareja son caprichos. Y después las consecuencias son altísimas porque trae grandes enojos, traumas y enfermedades”, reveló.
“La magia es cara. Para obtener un resultado son cuatro meses como mínimo y tiene un costo de dos millones de pesos aproximadamente incluyendo los materiales que necesitas. Encima las consecuencias son negativas para la personas que unís por eso no los hago. No corresponde porque le estás arruinando a una persona que no te corresponde”, resaltó.
Ante las estafas que sufren las personas al caer en manos de los denominados “manochantas” o falsos chamanes, contó que se sabe entre colegas de quiénes se trata, aunque la mayoría se terminan yendo a otra ciudad.
Sin embargo, los problemas entre “brujos” también están a la orden del día. A Nora la han querido correr y en la puerta de su casa se ha encontrado con bandejas de ofrendas con gallinas degolladas y hasta un muñeco vudú. También la espiritista se ha encontrado con orbes (investigadores la atribuyen a circunstancias paranormales) en su propiedad, algo que no debe estar en ningún hogar porque son negativas, según la vidente que registró el hecho.
“Son las entidades (que las detecta como forma de energías) que viene en forma de orbes. Hay que sahumar para batallarlas”, explicó la mujer. Para sahumar el hogar lo mejor es el incienso y mirra por sus propiedades de limpieza. En caso de trabajo de magia se utilizan otros elementos como el Estoraque y Sangre de dragón.
El mundo del esoterismo es amplio y desconocido para muchos. Y para un sector grande de la gente alberga muchos secretos que descubrir para entender quizás esa ciencia oculta, en donde se buscan respuesta de todo tipo.
“Es otro mundo. Es otra parte nuestra de nuestras creencias. Las cuestiones de esoterismo, la magia, astrología, son herramientas o elementos que nos ayudan a tratar de modificar nuestro estilo de vida del cual no estamos conformes. A veces, por cuestiones de patrones de crianza, no podemos salir de ese círculo vicioso. Estas técnicas ayudan un poco a salir para obtener una mayor calidad de vida tanto emocional como energética”, aseguró Nora.
“No se aferren a esto como una única solución, ni tampoco se obsesionen. Las consultas pueden ser de tres a seis meses que es el cambio energético que sufre una persona. Lo padecemos todos. Tengo clientes de hace 20 años, pero yo le digo a todo el mundo que esto es una orientación”, concluyó.
Te puede interesar...
Leé más
Turismo interno: qué buscan con la nueva Ley de Feriados, ante el desinterés de Nación
Noticias relacionadas
Dejá tu comentario