El clima en Neuquén

icon
23° Temp
43% Hum
La Mañana Borges

Borges en Neuquén: una conferencia en la oscuridad y el ritual del té con la hija de Castro Rendón

El escritor argentino más importante del siglo XX, del que hoy se cumplen 122 años de su nacimiento, visitó la ciudad en mayo de 1970 donde ofreció una charla en medio de un apagón eléctrico.

Hace 51 años, Jorge Luis Borges visitó Neuquén en el marco del festejo por los 80 años del médico y escritor Gregorio Álvarez. Durante su estadía en la capital neuquina, el autor de Ficciones brindó una conferencia en el edificio de Belgrano y Salta donde por entonces funcionaba la Universidad de Neuquén, el 8 de mayo de 1970.

Al llegar al aeropuerto de Neuquén, Borges, quien arribó acompañado de su esposa Elsa Astete Millán, fue recibido por Álvarez, el gobernador Felipe Sapag y el obispo Jaime De Nevares. El escritor había contraído matrimonio tres años antes, pero meses después de su viaje a Neuquén se separó. Parece ser que a Leonor Acevedo Suárez, la madre de Georgie no le gustaba la mujer que había elegido su hijo porque no sabía hablar inglés.

Ciego desde hacía unos años, mientras Borges brindaba la charla, parte de la ciudad quedó a oscuras como consecuencia de un apagón eléctrico. «Estoy acostumbrado a la oscuridad. Por mi parte no tengo inconvenientes en continuar la charla”, aclaró mientras los organizadores buscaban velas para iluminar la sala. La oscuridad no le impidió desarrollar sus ideas sobre libros, autores y viajes.

borges en Neuquén 3.jpg
El obispo de Neuquén Jaime De Nevares fue una de las personas que recibió a Jorge Luis Borges en el aeropuerto.

El obispo de Neuquén Jaime De Nevares fue una de las personas que recibió a Jorge Luis Borges en el aeropuerto.

Su porte algo dubitativo, su modo pausado de hablar arrastrando las palabras y la profundidad de sus reflexiones cautivaron al auditorio en medio de la penumbra.

«Estoy acostumbrado a la oscuridad. Por mi parte no tengo inconvenientes en continuar la charla”, aclaró Borges cuando ocurrió el apagón mientras los organizadores buscaban velas para iluminar la sala.

La presencia fue reflejada en una breve nota publicada en el diario Río Negro en la que se subrayó sus reflexiones acerca de la realidad y la fantasía en la literatura, aludiendo a los artificios imaginativos de Edgar Allan Poe, Henry James, H.G. Wells, autores que admiraba, y hasta se preguntó si la vida que vivimos diariamente "puede ingresar dentro del género llamado realista o en el más amplio de la fantasía".

122 años del nacimiento de Jose Luis Borges.mp4

Ese año había obtenido el Premio Interamericano de Literatura de Brasil otorgado por la Fundación Bienal de San Pablo y publicó El informe de Brodie, en el que los relatos se despliegan hasta el extremo de lo fantástico, una marca ciento por ciento borgeana.

El historiador Juan María Raone fue uno de los que lo agasajó. "Con un ciego uno trata de ser lo más amable posible. Imagínese lo que fue estar con Borges, que además de ciego era un gran escritor. Uno le hablaba como si le hablara a un padre”, recordó hace unos años atrás el historiador neuquino. Un ejemplar del libro “El tronco de oro” de Gregorio Álvarez, propiedad de Raone, lleva estampada la firma de Borges con su inconfundible letra diminuta.

borges en Neuquén 4.jpg
Jorge Luis Borges saluda al médico y escritor Gregorio Álvarez.

Jorge Luis Borges saluda al médico y escritor Gregorio Álvarez.

Durante su visita Borges cumplió con el ritual del té. El lugar fue la casa del doctor Eduardo Castro Rendón en la calle Santa Fe y la que más disfrutó, no sólo de la infusión sino también de escuchar a su admirado escritor, resultó ser su hija Inés.

"Con un ciego uno trata de ser lo más amable posible. Imagínese lo que fue estar con Borges, que además de ciego era un gran escritor. Uno le hablaba como si le hablara a un padre”, recordó el historiador Juan María Raone, sobre su encuentro con Borges.

Inés Castro Rendón comentó, en una entrevista con este diario hace unos años, que Borges aceptó de inmediato la invitación. “Luego de la conferencia me pidió que le ayudara a bajar los dos o tres escalones que tenía el escenario donde dio la charla, me agarró del brazo y nos fuimos caminando hasta la casa de mi padre”, recordó.

Hacía tiempo que Inés se había hecho una lectora fiel de Borges, desde que leyó el cuento “Hombre de la esquina rosada”. Al terminar de leer ese relato se preguntó “¿puede haber una persona que escriba así?». Lo había empezado a leer a comienzos de los ’60 en la ciudad de La Plata donde estudiaba Letras. Por aquel entonces, la joven no se imaginó que unos años después tendría la oportunidad de estar frente a frente con el creador de un universo literario inigualable y compartir una charla y un té.

De esa extensa conversación, la memoria de Inés retuvo algunas consideraciones expresadas por Borges sobre la literatura: "Dijo que el gran desafío de todo escritor es llegar a la simplicidad de lo que se quiere transmitir. Para Borges la forma barroca de escribir era sinónimo de vanidad o soberbia del escritor. Yo no era escritora pero me pareció muy certero lo que dijo aquel día".

ines2.jpg
Inés Castro Rendón, hija de Eduardo Castro Rendón, invitó a Borges a conversar sobre libros y autores y, compartieron un té.

Inés Castro Rendón, hija de Eduardo Castro Rendón, invitó a Borges a conversar sobre libros y autores y, compartieron un té.

También le quedó grabada la sugerencia de Borges acerca de la lectura: “Cuando lea a un autor y ese autor no le guste, no lo lea porque ese escritor todavía no escribió para usted, por más que se llame Shakespeare”.

Durante muchos años el fanatismo de Inés Castro Rendón por el autor de "Fervor de Buenos Aires" trascendió los libros. No se perdía ningunas de las entrevistas o programas especiales sobre Borges que se emitían por televisión. "Me gustan las cosas que Borges decía sobre la vida y la literatura. A diferencia de muchas amigas, a mí nunca me pareció un escritor difícil de entender", subrayó.

"Me gustan las cosas que Borges decía sobre la vida y la literatura. A mí nunca me pareció un escritor difícil de entender", comentó Inés Castro Rendón.

A Inés la unió algo más al gran escritor argentino del siglo XX. Cuando se puso de novia con Félix Luis Vignolles, quien después se convertiría en su marido, le prestó un libro de Jorge Luis Borges. “Félix habrá pensado: ‘Si esta chica me dio un libro de Borges, entonces no es tan idiota; lee y entiende a Borges’”, confesó. Además decía con orgullo y con una sonrisa que habían nacido el mismo , un 24 de agosto, “pero no del mismo año”.

-> “Tono” Rodríguez, el mozo que atendió a Borges

Son pocas las imágenes que retratan la visita de Borges a Neuquén. Una de ellas, lo muestra al escritor conversando con Gregorio Álvarez durante una cena y un poco más allá el gobernador Felipe Sapag. En la instantánea resalta la figura de un mozo con su clásico atuendo blanco y moño que se apresta a servirle la comida a los comensales. Hoy, a los 77 años, Alberto “Tono” Rodríguez muestra con orgullo a LMNeuquén la foto junto al escritor argentino más universal. “Esa foto la sacó un fotógrafo que trabajaba en Casa de Gobierno que le decíamos ‘Ácido'” y se disculpa ante el cronista por no recordar el nombre y apellido del profesional. "La cena fue en la Residencia de la Costa", acota.

mozo borges.jpg
El mozo Alberto

El mozo Alberto "Tono" Rodríguez atendió a Borges durante una cena cuando el escritor visitó Neuquén.

“Sabía que el invitado esa noche era el escritor Borges, quien fue muy respetuoso y atento mientras lo atendía”, recuerda “Tono” desde su casa del barrio Villa Farrel. Nacido en Chos Malal a los 3 años se instaló junto a su familia en la capital neuquina por el traslado de su padre, que era policía. Cuenta que ingresó a comienzos de los años ’60 como cadete a la Legislatura, cuando estaba sobre la avenida Olascoaga, y luego se desempeñó como ordenanza y mozo en Casa de Gobierno.

“Sabía que el invitado esa noche era el escritor Borges, quien fue muy respetuoso y atento mientras lo atendía”, recuerda Alberto “Tono” Rodríguez, el mozo que aparece en la fotografía de la cena.

"Tono" agradece que se lo recuerde como el mozo neuquino que atendió hace 51 años a quien es considerado uno de los escritores más importantes del siglo XX.

Te puede interesar...

Lo más leído

Leé más

Noticias relacionadas

Dejá tu comentario