¿Hay que lavar el kiwi aunque no comas la cáscara?: la advertencia que pocos conocen
Su aporte de vitamina C, fibra y antioxidante lo convierte en una de las frutas favoritas. Los especialistas alertaron por un error que comete la mayoría.
El kiwi se ganó un lugar en los hábitos alimenticios de grandes y chicos, por su sabor y por su aporte de vitamina C, fibra y antioxidantes, pero hay un detalle que muchos pasan por alto: debe lavarse antes de pelarlo o cortarlo. A pesar de que su cáscara no siempre se come, los especialistas realizaron una advertencia.
El error de confiarse en que “no se come la cáscara”. Durante el cultivo, el transporte y la venta, la fruta entra en contacto con tierra, pesticidas y microorganismos ambientales. La piel del kiwi, al ser vellosa y porosa, retiene con facilidad esos restos. Si no se limpia bien, parte de esa suciedad puede llegar al interior al momento de cortarlo.
Muchas personas creen que no tiene sentido lavar una fruta que luego será pelada. Pero al introducir el cuchillo, los contaminantes del exterior se transfieren a la pulpa. Es un proceso casi invisible, que puede incluir bacterias como E. coli o Salmonella, presentes en la superficie de frutas manipuladas sin higiene.
El kiwi puede acumular pesticidas, polvo y bacterias en su piel vellosa; lavarlo antes de pelarlo reduce el riesgo de contaminación.
La recomendación de los expertos es lavar el kiwi bajo el chorro de agua y frotar suavemente con un cepillo de cerdas blandas, especialmente entre los vellos de la cáscara. No es necesario usar jabón ni productos químicos: el objetivo es eliminar los residuos sólidos y reducir la carga microbiana.
Este consejo se aplica también a otras frutas con piel gruesa o rugosa, como el melón, el durazno o la papaya. En todos los casos, lavar antes de cortar es una medida básica de prevención.
Comer la cáscara: más fibra, pero también más cuidado
En los últimos años, algunas tendencias de alimentación recomiendan consumir el kiwi con cáscara para aprovechar su alto contenido de fibra y polifenoles. Quienes lo hacen aseguran que, una vez lavado, la textura se vuelve más agradable y el sabor menos terroso.
Sin embargo, este hábito exige todavía más precauciones. Un lavado superficial no alcanza: es necesario eliminar por completo los residuos del cultivo, especialmente si el kiwi no es orgánico.
Lavar correctamente el kiwi antes de consumirlo, incluso si se pela, reduce riesgos de intoxicaciones y permite disfrutar de todas sus propiedades nutritivas. Detrás de una fruta tan pequeña y saludable, hay un recordatorio simple pero esencial: la seguridad alimentaria empieza en casa, con algo tan básico como abrir la canilla y tomarse unos segundos más para hacerlo bien.
La razón extraordinaria de por qué te conviene poner cáscaras de limón en un frasco
El limón es una fruta que proporciona múltiples beneficios. Además de sus propiedades alimenticias, algunos expertos destacan que es recomendable poner cáscaras de limón dentro de un frasco. ¿Por qué? Ojo, no se trata sólo de disfrutar de su aroma. En este artículo, te contamos en detalle cuáles son las ventajas de este procedimiento.
Mitos y verdades del limón.
Cabe destacar que el limón, entre tantos usos, se emplea para elaborar postres y dulces; en bebidas naturales como la limonada y la leche merengada; en la preparación de salsas, aliños y vinagretas; se utiliza en diversas recetas para acompañar los alimentos y, claro, su jugo también condimenta carnes, caldos y otros alimentos.
Entre otros beneficios que resultan de conservar las cáscaras de limón dentro de un frasco, pueden mencionarse los siguientes:
- Ahuyentan insectos.
- Sirven como fertilizante natural para las plantas.
- Al mezclarlas con vinagre, se puede crear un limpiador multiuso.
- Al combinarlas con bicarbonato, se pueden emplear para desodorizar la heladera.
Lo cierto es que conservar las cáscaras de limón dentro de un frasco también nos puede ayudar a ahorrar dinero, elaborar nuestro propio producto de limpieza –libre de químicos-, reciclar residuos y reducir significativamente los malos olores en la cocina.
Te puede interesar...











Dejá tu comentario