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La Mañana Aluminé

La lucha de Aluminé contra un parásito derivado de los perros que afecta a humanos

Desde el municipio se lleva a cabo un plan integral para poder erradicar la hidatidosis. Es asintomática y genera quistes en el hígado y en los pulmones.

La superpoblación de perros en Aluminé es un problema de salud pública. El Municipio apunta a la responsabilidad de los vecinos para poder controlarlos, mientras que desde el hospital se organizan para poder detectar el parásito que estos animales distribuyen en toda la población. “Trabajamos desde todas las problemáticas, pero este laburo no tiene resultados en el momento”, aclaró a LMN Anahí Romero, Directora del municipio saludable Aluminé.

Según describió esta funcionaria, desde que llegaron a la gestión en 2015 observaron la cantidad de canes que había en las calles. Al continuar la investigación, percibieron que “la gran mayoría tenía collar y, por ende, dueño”, pero deambulaban por toda la ciudad y defecaban en cualquier lado.

Encontraron que dentro de esa materia fecal se alojan huevos de este parásito y se encendieron las alarmas. “Hicimos una ordenanza para poder generar una responsabilidad social, en la que debían tener el animal dentro de un lugar cerrado y si eso no era posible, debían mantenerlo atado y sacarlo a pasear para mantener la salud y la vitalidad del perro”, aclaró.

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Castran a los perros en Aluminé para poder vencer al parásito.

Castran a los perros en Aluminé para poder vencer al parásito.

Bajo este contexto, comenzaron a alertar sobre la cantidad de casos de hidatidosis en la población. Según la información del ministerio de Salud de la Nación, este parásito ingresa principalmente por la boca y produce una infección dentro del organismo. Esto ocurre por actividades como darle besos al perro, dejarse lamer por el perro, comer verduras contaminadas o tomar agua contaminada.

Ante este panorama, desde el Municipio se llevó adelante un plan de castración gratuita para frenar la reproducción de perros en la localidad y así bajar la cantidad de parásitos. Además, hicieron charlas para concientizar a los vecinos de las problemáticas que pueden traer los perros y suministran cada 45 días los antiparasitarios para cada perro de la ciudad.

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Castrar no alcanza, ni el medicamento solo alcanza. Es una política que hay que llevar a cabo de una forma integral para poder erradicarlo de acá”, aseguró Romero.

A su vez, habían pedido financiamiento para un quirófano móvil e ir a castrar a las comunidades de Aluminé, “pero aún no llegó”. Ante lo urgente de esta problemática, desde el municipio se organizaron con el hospital local y las comunidades para ir los fines de semana a castrar a los asentamientos que rodean a Aluminé.

“Las comunidades nos prestan escuelas o espacios para poder hacerlo y vamos. No solo castramos sino que damos charlas para concientizar y llevamos medicamentos. Porque esto no es un problema solo de la ciudad”, dijo, al aclarar que Salud implementó una ecógrafo y revisó a los nenes de las comunidades a ver si tenían el virus “para detectarlo a tiempo y darle otro tratamiento y no llegar a una cirugía”.

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“Es que este virus al principio es asintomático. El huevo ingresa a los órganos internos en donde se alberga y pueden pasar muchos años hasta poder detectarlo”, aseguró Romero, al aclarar que “lo positivo” es que hay mecanismos para darse cuenta -como el ecógrafo-. Para la Directora, el problema “está controlado en la localidad”, aunque cree que hay que llegar a todos los pequeños lugares.

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-> Un problema de salud humana y ambiental

Romero aseguró que la gran cantidad de perros generan problemas de salud humana y ambiental. Al tenerlos sueltos, estos animales suelen desparramar la basura y ensuciar la ciudad, “más allá de ser el vehículo de este parásito”.

“Lo que también percibimos es que gran parte de los inconvenientes que generan los perros es por el descuido de sus dueños. Es decir, el problema no es que haya perros callejeros sino que los vecinos los dejan libres y no observan qué hacen”, aseguró.

La prevención y concientización, sumada a la distribución de los antiparasitarios y a la castración, se convirtió en los pilares de una solución que “parece que no va a llegar nunca”. “En 2015 cuando arrancamos todo repartimos 63 pastillas desparasitarias y el año pasado fueron 500 perros los que la recibían”, ejemplificó.

Durante estas semanas están trabajando en un censo animal, que consiste en visitar cada una de las casas y constatar cuántos perros tiene. “Sabemos que hay muchos, pero nunca le pusimos una cifra. Así que en algunos días creo que la voy a tener y con eso continuaremos con el trabajo que venimos haciendo”, planteó Romero, al aclarar que día a día “se está llegando al objetivo”.

Empezamos este plan como un objetivo muy lejano, pero año a año nos vamos acercando y le vamos sumando herramientas para abordar este problema. Seguimos apostando a los tenedores responsable y tenemos un programa de radio semanal para hablar de lo que pasa en la calle y para que evacúen las dudas que cada uno tenga”, explicó.

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Además, pondrán talleres de adiestramiento canino, ya que “muchos de los vecinos plantearon que sus perros no le hacen caso”. Con la “esperanza” de seguir agregando alternativas a la soluciones de este parásito y de las consecuencias de la superpoblación de perros en Aluminé, Romero concluyó: “Esta es una salida colectiva y estamos trabajando hace años en esto. Es lento, pero estamos avanzando para que los perros no sean un problema para la localidad ”.

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--> Tres datos sobre hidatidosis

Según el Ministerio de Salud de la Nación, la hidatidosis es una enfermedad producida por un parásito que se llama Echinococcus granulosus y que transmite el perro a través de su materia fecal. Cuando el perro infectado elimina su materia fecal, salen con ella miles de huevos del parásito que contaminan el agua, el pasto, la tierra, las verduras y hasta quedan adheridos en el pelo del mismo perro.

  • ¿Cómo se transmite?

La infección se produce cuando los huevos del parásito llegan a la boca de las personas (principalmente de los niños) y esto ocurre por actividades como: darle besos al perro, dejarse lamer por el perro, comer verduras contaminadas, tomar agua contaminada, entre otras.

  • ¿Cuáles son los síntomas?

Las personas enfermas desarrollan quistes en el hígado y los pulmones, aunque también pueden llegar a otros lugares del cuerpo. Las personas con quistes hidatídicos pueden no tener síntomas durante muchos años (son portadores asintomáticos) hasta que el quiste es más grande y aparecen los síntomas (convirtiéndose en portadores sintomáticos).

  • ¿Cómo es el tratamiento?

En las personas los quistes pequeños se tratan con medicación, pero si alcanzan un gran tamaño se debe recurrir a la cirugía. En los perros también se realiza un tratamiento con medicación para evitar la eliminación del parásito por materia fecal.

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