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La Mañana Vista Alegre

La oscura trama detrás del crimen en la toma de Vista Alegre

Varias gestiones de gobierno de una chacra "mal loteada", sin servicios y vecinos que se disputan las mismas tierras, es uno de los trasfondos de la muerte a balazos de Fernando Paredes.

Fernando Paredes tenía 32 años y le cuidaba el terreno a su hermana en una carpa, cuando un grupo de personas lo tomó por asalto, le disparó varias veces al cuerpo hasta quedar tendido sin vida en el suelo en una chacra de Vista Alegre Sur.

Estaba en el denominado loteo Los Pinos, que desde hace años tiene dramas con la titularidad de las tierras y los vecinos se cuidan de las usurpaciones. En estas horas, Criminalística toma pruebas del lugar y tiene identificado a los supuestos autores que dejó perplejo a un pueblo rural disperso, con casi 5 mil habitantes.

¿Pero qué hay detrás del crimen? La trágica historia terminó de la peor manera, con un trasfondo que viene desde hace más de una década: hay una suerte de “guerra de tierras” en Vista Alegre Sur, en un pueblo de chacras donde todos se conocen las caras.

La polémica comenzó allá por 2010, cuando se fraccionó una chacra al lado del galpón de FUVA (hoy Vista Sur SA), donde la empresa ATHENZ subdividió unos 300 lotes, con una reserva municipal de 50, de acuerdo a la ordenanza 546/10, a la que pudo acceder LM Neuquén.

El compromiso en su momento era llevar servicios, como luz, agua y cloacas, pero ninguno de ellos se hizo por una década, en la que pasaron tres intendentes: una gestión de Marcelo Pieroni, dos de Gabino Jofré y una del actual, Daniel Ridao.

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La tenencia precaria de unos de los lotes en el barrio de Vista Alegre donde estaba Paredes.

La tenencia precaria de unos de los lotes en el barrio de Vista Alegre donde estaba Paredes.

La reserva de 50 lotes sociales para la Municipalidad de Vista Alegre tenía el objetivo de descomprimir la demanda de tierras en el poblado, donde la mayoría de los jóvenes tiene que construir en el terreno de los padres, y en un pueblo donde no hay futuro con chacras loteadas y una industria frutícola devastada.

En 2014, la comuna armó un listado de beneficiarios de esos lotes sociales (están ubicados en el fondo de la chacra porque los primeros son privados) y de a poco se levantaron algunas casillas, pero todas sin servicios. Todo esto se hizo bajo la ordenanza 695/14, de acuerdo a lo informado a este diario.

Como se conoce, los lotes sociales no pueden venderse ni transferirse, sin autorización municipal. Y desde hacía algunas semanas, el rumor que empezó a correrse en el pueblo era que la comuna comenzó con un proceso de escrituración de tierras, y algunos de los beneficiarios no estaban dentro de ese listado.

Muchas de las familias tenían un acta de tenencia precaria y quienes no construyeron en el plazo de dos años, empezaron a tener problemas. De ahí en más, comenzaron a circular amenazas: los propios beneficiarios de eso lotes, que no pudieron construir, recibieron algunas presiones por parte de usurpadores.

Así empezó una escalada polémica de cruces, violencia y malos entendidos, que trágicamente terminó con la vida de Paredes el domingo por la tarde.

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