Después de ser asistida por un grupo de obreros, la trasladaron en helicóptero a un hospital de Tampa, donde fue operada.
Una nena de 9 años atravesó un momento terrible mientras jugaba dentro del agua en una playa de Boca Grande, una pequeña ciudad de la isla Gasparilla, al suroeste de Florida, en Estados Unidos. Es que un tiburón la atacó y le causó graves heridas en una de sus manos.
“En lo que se suponía que sería un día divertido y soleado, Leah, de 9 años, experimentó un evento aterrador que le cambió la vida”, expresó Max Derinskiy, tío de la víctima, en el comienzo de la descripción de la colecta online que lanzó para afrontar los gastos por posibles cirugías, fisioterapia, terapia psicológica, entre otros tratamientos, que deberá atravesar la menor.
En esa misma publicación creada en la plataforma GoFundMe, el sujeto le agradeció a Jesús por “la rápida respuesta de los equipos de emergencia y la habilidad del cuerpo médico” que atendió a la niña, quien se encontraba estable.
“Si bien estamos sumamente agradecidos de que Leah haya sobrevivido, el camino que le espera será largo y lleno de sanación física y emocional. El Life Flight ya incluye una factura médica abrumadora”, mencionó Derinsky, en referencia al servicio de transporte en helicóptero de pacientes que necesitan cuidados intensivos o urgentes que trasladó a su sobrina.
En esa dirección, indicó que creó esta colecta “para ayudar a aliviar parte de la carga financiera de su familia durante este momento inimaginable, ya que actualmente no tienen seguro médico”.
Cómo fue el ataque del tiburón
Según esa misma descripción, el tiburón atacó a Leah mientras jugaba en el agua con sus hermanos el pasado miércoles. La familia comentó a Gulf Coast News que la nena se sumergió durante unos segundos en el agua y que, al salir a la superficie, comenzó a gritar.
Su madre estaba muy cerca, a un metro y medio aproximadamente, con otros dos hijos pequeños. La mujer aseguró que la mano de la nena estaba “cubierta de sangre y casi separada de su brazo”, según información que reprodujo aquel mismo medio.
Dijo, además, que tras el incidente llevó a los chicos hacia la orilla mientras su marido, que también estaba sumergido, nadaba hacia la superficie.
De acuerdo con el mismo relato, Leah caminó por sus propios medios hacia la orilla, donde recibió la asistencia de obreros de la construcción, que le envolvieron la mano con unas remeras.
La madre contó que la nena fue sometida a una intervención quirúrgica de seis horas, en la que los médicos pudieron recomponer su mano.
“Los médicos lograron restablecer el flujo sanguíneo en la mano y los dedos. Muestra algo de movimiento en dos dedos, pero no siente el resto”, dijo la familia Lendel en un comunicado difundido por el hospital.
Ahora, dijo su tío, comenzará un largo proceso para que la niña pueda recuperar movilidad en la mano afectada. La colecta para ayudar en ese tratamiento, dos días después de ser lanzada, acumulaba poco más de 33 mil dólares.
Para las autoridades, fue un ataque de un tiburón toro
Según dijo el jefe del Departamento de Bomberos de Boca Grande, las heridas eran compatibles con el ataque de tiburón, pese a que el animal no había sido localizado después del episodio.
Expertos coincidieron en que se trató de una agresión de un tiburón toro, una especie característica en las costas del estado de Florida, principalmente en verano.
Alfonso Tello y sus compañeros de trabajo, que se encontraban trabajando cerca, asistieron rápidamente a la nena luego del estremecedor hecho.
"Estábamos almorzando y escuchamos a alguien gritar, y fue entonces cuando llegamos. Estaban llorando y todos estábamos en shock", recordó.
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