El futuro de la política neuquina está abierto y será interesante ver cómo se desarrollan las nuevas dinámicas a medida que se acerquen las elecciones legislativas nacionales.
En el contexto actual de la política argentina, los cambios que está experimentando el país bajo la presidencia de Javier Milei, particularmente en el ámbito económico, están comenzando a anticipar una dinámica electoral más que interesante. Lejos han quedado ya las especulaciones que involucraban una huida en helicóptero, una parálisis legislativa o una crisis económica sin precedentes impulsada por un loco idealista.
Los pronósticos son optimistas: en su discurso por los 100 años de la Cámara de Comercio Argentina, Milei sentenció: “Hoy tengo el orgullo de decirles que el intervalo de dolor terminó, la recesión terminó. Estamos saliendo del desierto. El país finalmente ha empezado a crecer”. Efectivamente, la inflación se ha contenido, el riesgo país desciende con peso y después de muchos años de penurias, se espera que el crecimiento económico en 2025 sea del 5%.
En medio de este optimismo, Javier Milei ha logrado mantener una aprobación popular estable, incluso después de tomar medidas económicas difíciles que afectaron el bolsillo de los argentinos en el corto plazo. Si este rumbo económico se sostiene y los pronósticos de crecimiento para 2025 se cumplen, el "león libertario" y su espacio político, se perfilan como una imparable máquina de ganar votos.
La pobre oposición a Milei
En frente de Milei no hay nada. La clase política tradicional yace deslegitimada, el PRO y el radicalismo se han disuelto en tibias oposiciones y en igualmente tibios apoyos al gobierno y serán incapaces de presentar batalla en las urnas de manera independiente.
El peronismo aún sufre el estricto tutelaje de Cristina Kirchner, que no permite que otras figuras surjan. A pesar de tener la imagen negativa mas grande entre los políticos argentinos, todavía sostiene una base electoral que ronda el 20 por ciento, suficientemente sólida como para liderar el espacio opositor.
Incluso aquellos que no tienen como preferencia a Milei saldrían a dar un paseo por la oferta electoral y ante el miedo del retorno de Cristina, elegirían al presidente. En pocas palabras, Cristina Kirchner es el enemigo perfecto del oficialismo.
En Neuquén, el panorama es más incierto
Si bien el panorama nacional se dibuja con un Milei en ascenso gracias a sus medidas económicas que parecen haber empezado a dar frutos, en Neuquén, una provincia que ha demostrado tener una identidad política propia, la situación es mucho más compleja.
La llegada de la representación oficial de La Libertad Avanza en la provincia, a través de la figura de la diputada nacional Nadia Márquez, marca el comienzo de una nueva etapa para el liberalismo local, pero no sin desafíos.
En 2023 Neuquén Carlos Eguía ofició de alfil libertario, obteniendo el 8 por ciento de los votos para Gobernador. Se sospecha que su candidatura fue diseñada más como instrumento de división de la oposición para favorecer al entonces oficialismo del MPN, que por una voluntad real de abrazar las ideas de la libertad. Por ello, su permanencia en el espacio libertario duró menos que un suspiro y finalizó en un papelón político con más drama que una novela turca.
Márquez, Figueroa y la Neuquinidad
Nadia Márquez parece haber marcado la diferencia respecto de su antecesor pseudolibertario. Ganó la confianza del círculo íntimo del presidente, sin por ello romper con el espacio del Gobernador Rolando Figueroa, a quien acompañó en su épica victoria contra el MPN y con quien sostienen una cordial y transparente relación.
Por otro lado, en Neuquén, se encuentra el gobernador Rolando Figueroa, quien encarna una figura política que transita un camino intermedio entre el peronismo y el liberalismo. Figueroa, quien logró una victoria histórica sobre el MPN en 2023, es una figura clave, tanto por su vínculo con el sector energético de Vaca Muerta como por su capacidad para gestionar los intereses provinciales. Figueroa representa el espacio de la neuquinidad, un modelo político que ha demostrado ser funcional a los intereses de la provincia, particularmente en términos de autonomía y desarrollo económico.
En este escenario, La Libertad Avanza y la figura de Nadia Márquez se posicionan como la principal alternativa que desafía al modelo de Figueroa, quien se muestra como un líder pragmático con una base territorial fuerte. Si bien la relación de Márquez con Figueroa parece cordial y ambos comparten algunos principios, la competencia electoral inevitablemente se intensificará a medida que ambos sectores busquen consolidar sus bases.
El enfrentamiento electoral de 2025 en Neuquén se perfila como una batalla entre dos modelos políticos:
Mileismo y libertad económica: Nadia Márquez y su representación de La Libertad Avanza se anclan en el éxito de la figura de Javier Milei, y en la promesa de un cambio radical hacia la libertad económica, con un énfasis en la reducción de impuestos, el recorte del gasto público y la autonomía del mercado. Esta propuesta tiene una gran resonancia entre aquellos que buscan una transformación profunda en la política económica y la gestión pública. Sin embargo, aún queda por ver cómo el mensaje de Milei, que a nivel nacional tiene gran aceptación, se traduce en votos en una provincia tan particular como Neuquén, donde las demandas locales, como la gestión de Vaca Muerta, juegan un papel crucial.
Neuquinidad y pragmatismo local: Por otro lado, Rolando Figueroa, con su perfil técnico y conocedor de las dinámicas provinciales, representa un modelo que prioriza la estabilidad y el desarrollo territorial sin renunciar a la autonomía. Figueroa ha logrado captar el apoyo de sectores que priorizan los intereses de la provincia sobre las agendas nacionales, y su vinculación con el éxito de Vaca Muerta ha sido clave para su posicionamiento. A diferencia de los liberales, su enfoque es más moderado y busca equilibrar el desarrollo económico con una gestión eficiente del recurso y la justicia social.
Un escenario incierto pero emocionante
Con las buenas perspectivas económicas que se prevén para 2025, los dos espacios políticos de mayor proyección en Neuquén deberán competir en un terreno que hasta ahora ha estado dominado por el MPN, el kirchnerismo y los partidos tradicionales, pero que ahora ve emerger a nuevas figuras con un fuerte apoyo popular. La competencia electoral será decisiva no solo para el futuro político de Neuquén, sino también para definir el rumbo de la provincia en un momento clave en el que se combinan la enorme proyección del gas y el petróleo con la necesidad de un cambio profundo en la política económica y social.
El desafío será cómo cada uno de estos espacios podrá conectar con los votantes. Si bien la figura de Milei en la esfera nacional puede ser un atractivo para muchos, la particularidad de Neuquén exigirá que tanto Márquez como Figueroa puedan ofrecer propuestas concretas y ajustadas a la realidad local. La campaña, por lo tanto, probablemente la disputa de los votos no se basará tanto en ataques al otro, sino en la exposición de fortalezas propias, algo que hasta ahora ha sido una carencia en muchas campañas políticas.
El futuro de la política neuquina está abierto y será interesante ver cómo se desarrollan estas nuevas dinámicas a medida que se acerquen las elecciones de 2025. El equilibrio entre la libertad económica y el pragmatismo local marcará el camino hacia la consolidación de un nuevo liderazgo en la provincia.
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