Teletrabajo, un aliado para combatir el ausentismo laboral
Afirman que el modelo híbrido y la mayor flexibilidad que las empresas incorporaron a partir de la pandemia se traduce en una reducción en el nivel de faltas de los empleados.
Aunque había comenzado como una idea incipiente y poco probable, el trabajo remoto se impuso de manera forzada y masiva en todo el país a partir de la pandemia de coronavirus y el confinamiento estricto de 2020. Las medidas sanitarias obligaron a las empresas a capacitarse en herramientas digitales para adaptarse con rapidez a una nueva modalidad de trabajo y hoy, dos años más tarde, se nota una transformación profunda de los hábitos laborales que podría ser más beneficiosa de lo que parece.
La imposibilidad de observar a los trabajadores durante toda la jornada laboral despertó algunas sospechas sobre los niveles de productividad que podrían tener los empleados desde sus hogares, que son espacios no orientados a las actividades productivas y donde reinan las distracciones. Por eso, muchas empresas definieron el regreso a la presencialidad plena en las oficinas o aceptaron que su plantel sólo pueda hacer uso de algunos días de trabajo remoto.
Sin embargo, los especialistas de recursos humanos aseguran que la implementación del trabajo remoto o la modalidad híbrida, con algunos días en la oficina y otros en casa, tuvo un impacto positivo en los registros de ausentismo laboral. La oficina hogareña brinda más comodidad y la flexibilidad horaria para recuperarse de un malestar o dedicarse a algunas tareas domésticas, por lo que se redujo el número de colaboradores que piden certificados para faltar al trabajo.
"Estar presente en el hogar o trabajar desde otros sitios nos permiten atender cuestiones fuera de lo laboral por las cuales no requerimos pedirnos días de tramites o horas fuera de la oficina", explicó Josefina Urquiza, especialista en Recursos Humanos y partner de la consultora KnowmadHR. Según explicó, atribuye la reducción del ausentismo a "una necesidad del humano a estar físicamente presente en sus domicilios para cubrir necesidades de índole personal y familiar".
El trabajo remoto permite que muchos empleados hagan un mejor balance entre su vida personal y la laboral. Así, no necesitan pedir permisos para salir de la oficina cuando tienen que atender necesidades de sus hijos pequeños, realizar trámites o reponerse de algún malestar.
"Hoy las personas se bloquean en sus calendarios horarios del mediodía para ir a buscar a sus hijos. Intentan coordinarlo con el descanso por almuerzo y cubren así dos necesidades fundamentales", detalló Urquiza y agregó que esas opciones brindan un mayor sentido de pertenencia con la empresa e incrementan la satisfacción de los empleados.
Por otra parte, el confinamiento de la pandemia también aceleró la transformación digital para entidades bancarias, empresas y organismos del Estado. Así, los empleados ya no necesitan pedir tantos permisos especiales para hacer trámites presenciales en dependencias públicas, porque pueden avanzar con muchos procesos de manera digital.
Por otra parte, también hay una tendencia a usar los días de teletrabajo para hacer reposo o recuperarse de afecciones leves de salud, como un resfrío o un malestar estomacal, que antes motivaban a los empleados a pedir un certificado médico para no asistir a la oficina. En el mismo sentido, la atención de niños o familiares enfermos se puede combinar con actividades laborales que se realizan a través de distintos dispositivos electrónicos. " Sin duda son aspectos que mejoran el sistema laboral", agregó Urquiza.
Si bien la pandemia de coronavirus tuvo momentos más críticos con elevadas cuotas de ausentismo a partir de las exigencias de aislamiento para los casos positivos o los contactos estrechos, también generó transformaciones en la cultura del trabajo que invirtieron esa tendencia en los rubros en los que no es necesaria la presencialidad. Por otra parte, la flexibilización de las medidas sanitarias incrementó la demanda de actividades presenciales, como el comercio, la gastronomía o el entretenimiento.
Con este panorama, muchos empleadores decidieron no regresar de manera completa al trabajo presencial. "Hay una tendencia hacia el sistema híbrido", explicó Urquiza y agregó: "No todas vuelven 100% al presencial pues identificaron los beneficios sociales que tiene el sistema remoto", sobre todo en un contexto de mayor penetración de tecnologías que favorecen la comunicación interna dentro de cada compañía.
¿Por qué muchos eligen el modelo híbrido?
Más allá de la reducción del ausentismo, el teletrabajo sigue generando suspicacia en torno a los niveles de productividad y un riesgo que puede tener un impacto negativo a largo plazo: la pérdida de identificación con los espacios de pertenencia. Por eso, Urquiza aseguró que "el modelo mixto es el más adecuado para el sistema empresarial", porque recupera la agilidad y la identificación que brinda la oficina con la flexibilidad necesaria para atender necesidades domésticas y así equilibrar el trabajo con la vida personal.
En ese sentido, desde la consultora Adecco informaron sobre algunos peligros que llegan a partir de la implementación del trabajo 100% remoto. "Cuando las personas eligen qué días trabajan desde su casa, existe el riesgo de que los compañeros de equipo asistan a la oficina en días diferentes, ocasionando que quienes hayan ido a la oficina se encuentren en tantas videollamadas como antes, perdiendo el objetivo", señalaron y agregaron que es necesario que los equipos coincidan en los días de trabajo presencial.
Por otro lado, señalaron que se puede crear una diferencia entre los que trabajan de manera presencial y los que siguen realizando tareas desde casa. "Puede generarse una situación en la que quienes van regularmente a la oficina formen conexiones más sólidas, resultando en mayores oportunidades de promoción. Esto representa un problema particular, ya que es más probable que quienes elijan trabajar desde su casa pertenezcan a grupos que ya cuentan con menor representación en los niveles más altos de gestión", indicaron y agregaron que es importante verificar si hay alguna conexión entre los ascensos y la presencialidad, así como la necesidad de que todos pasen un tiempo equitativo en la oficina.
A su vez, señalaron que, para algunas personas, trabajar desde casa seguirá siendo una solución menos que perfecta, ya sea debido a la configuración de su hogar o porque simplemente no les gusta, les puede resultar poco viable. Por eso, aconsejaron: "una buena opción es brindar acceso a espacios de terceros, como espacios de coworking o un espacio de oficina local".
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