Certificados médicos truchos en Neuquén: qué se sabe sobre todas las causas
El fiscal Narváez consideró importante la pericia informática a los dispositivos. Los recetarios utilizados serían del Hospital Castro Rendón.
En el último tiempo en Neuquén se abrieron múltiples causas que investigan la emisión, venta y compra de certificados truchos. La última se inició a partir de la denuncia de una médica en la División de Delitos Económicos por la circulación de certificados apócrifos a su nombre. La Fiscalía avanzó en la apertura de los elementos secuestrados.
El allanamiento fue realizado el jueves pasado en una vivienda del oeste neuquino, en las inmediaciones del Hospital Heller, y arrojó resultados positivos: se demoró a dos personas mayores y hallaron 134 constancias médicas rubricadas por diferentes médicos. Además, esta semana la Fiscalía trabajó en la apertura de los dispositivos electrónicos incautados.
En el inicio de una nueva semana, el fiscal del caso, Juan Narváez, precisó en una entrevista radial que "se tomó conocimiento de una médica de Galeno, pero estamos hablando de cinco a siete médicos que fueron víctimas" y agregó: "Resta chequear esos recetarios, cotejarlos, realizar pericias caligráficas. Lo importante va a ser la pericia informática hecha a los dispositivos de las personas demoradas".
Certificados truchos en las redes sociales
La investigación comenzó el 16 de octubre por una denuncia de una médica que se percató que estaban utilizando supuestamente su sello y su firma para recetar reposo de varios días, según detalló Gerardo Oviedo, subcomisario del departamento de Delitos Económicos a LMNeuquén.
A partir de allí, la pesquisa se trasladó a las redes sociales y arribó a ciertas publicaciones realizadas por Facebook. En el sector Market Place encontraron que personas sospechosas promocionaban públicamente la confección de curriculum vitae y certificados truchos.
"Serían recetarios del hospital Castro Rendón", adelantó Narváez esta mañana y agregó que, sin embargo, las personas demoradas "no guardan ningún tipo de relación con el servicio de salud, se hicieron de alguna forma con el estampado del castro Rendón y comenzaron a adulterar los certificados y hacer esta maniobra".
Sobre la confección de los certificados, el fiscal mencionó que había 134 certificados hechos y pudieron ver que se encontraban estampados, después ellos lo completaban y anticipó que "se puede vislumbrar que las firmas no son hechas por alguien, sino por una impresión a máquina" por lo que sembró duda sobre la posibilidad de hacerlas.
Además, la investigación a cargo de la policía informática sobre la notebook y los celulares secuestrados debe avanzar para determinar cómo se concretaban las ventas con posibles clientes que compraban los certificados truchos. Aun así, Narváez afirmó que "lo más concreto y lo sorprendente es que publicaban algo que era ilegal, en sus perfiles de Facebook utilizaban sus nombres personales para ofrecer el servicio diciendo ´armo certificado médico´", y agregó: "Entendemos que el primer contacto que debe existir es por Messenger y luego quizá se iban a una plataforma de la dark web como Telegram". Sobre la dinámica también sumó que en las publicaciones se fijaba un precio que luego se remitía por mensaje.
Un delito frecuente y poco condenado
Si bien proliferaron las causas por certificados truchos, hasta el momento no hubo una pena ejemplar para quienes cometen los delitos de falsificación de documentos públicos, estafas virtuales, o similares, según admitió el propio fiscal de Delitos Económicos. En este sentido, Narváez aseguró que llegado el momento solicitarán penas justas: "El mínimo es bajo, pero el máximo es de 6 años, por eso amerita una buena investigación y lograr una condena ejemplar, porque son más de 130 certificados".
Al respecto de la "necesidad de una condena ejemplar" el fiscal indicó que "no solo hay una médica damnificada sino toda la sociedad y además por la práctica vemos que es un delito que se comete más y más, por eso la necesidad de una condena ejemplar".
Por último, también se refirió al mensaje que quieren dar a quienes incurren en el delito de fraude: "Esto implica un acto de prevención y no consumirlos, no llegar a pagar un certificado falso y presentarlos en uno de sus trabajos".
Más causas por certificados truchos
El fiscal Narváez también trabaja sobre casos similares como el de los 80 policías que compraban certificados médicos falsos para presentarlos y no ir a trabajar. "Es una causa grande y compleja, estamos avanzando en la formulación de cargos", indicó. Todo inició gracias a una empleada policial a cargo de las carpetas médicas de la Dirección Personal que descubrió la irregularidad.
Según supo LMNeuquén, se estima que la fecha de la audiencia de formulación de cargos se realizará a principios de 2025 por fraude en perjuicio de la administración pública. En ese caso se está terminando de peritar los certificados, lo cual implica analizar diagnósticos, fechas, firmas, pero el volumen que se tuvo que analizar es mayor que otros, porque cada policía presentó entre 1 y 5 certificados. Por su parte, la Jefatura de Policías no tomó ninguna determinación con los 80 agentes implicados.
Luego, se tramitan dos causas grandes por emisión de certificados truchos. Una es la del médico de Andacollo, investigado por expedir 800 licencias psicológicas en el lapso de cuatro meses, y que fueron presentados por trabajadores estatales en diversas ciudades de la provincia. En este caso, la Fiscalía advirtió que se está trabajando con la apertura de dispositivos electrónicos para tratar de obtener información de relevancia para la investigación. En forma preliminar, el delito bajo investigación es fraude en perjuicio de la administración pública y expedición de certificado médico falso.
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