El clima en Neuquén

icon
25° Temp
29% Hum
La Mañana pacientes

COVID-19: el ACV puede ser el primer síntoma

Fuerte advertencia, principalmente para los jóvenes. La investigación se llevó a cabo en Canadá, con presencia argentina.

Una investigación llevada a cabo en Canadá y encabezada por un neurólogo argentino compartió una fuerte advertencia: en algunas personas, sobre todo jóvenes, el primer síntoma del COVID-19 es un ataque cerebrovascular ( ACV).

Ni fiebre, ni tos, dolor de garganta, dificultad respiratoria, dolor de cabeza o muscular, diarrea o vómitos, ni pérdida repentina del olfato y/o del gusto. Es posible que algunos infectados del coronavirus tengan como primera reacción la gravísima emergencia médica del derrame cerebral. "Cualquier paciente que llegue a la guardia en esta época con un ACV, uno debe pensar que puede tener COVID-19. ¿Por qué? Porque el coronavirus es una causa de ACV. ¿Cuándo hay que sospecharlo más? Cuando son pacientes jóvenes, sin antecedentes de comorbilidades o factores de riesgo, viven en zonas con circulación comunitaria del virus, y cuando se ven grandes coágulos en las arterias", explicó el médico argentino Luciano Sposato, quien lideró el estudio.

El profesional compatriota, junto a su equipo de la Universidad de Western Ontario, realizó una revisión sistemática de estudios publicados en revistas científicas con el objetivo de conocer la frecuencia, las características clínicas y los resultados de los ataques cerebrovasculares asociados al virus pandémico. El análisis incluyó 160 pacientes, 57% hombres y 43% mujeres, de los cuales 29 eran menores de 50 años. La media de edad fue de 65 años. Uno de los principales resultados del artículo publicado en la revista Neurology, de la Academia Americana de Neurología, es que alrededor de 2 de cada 100 personas hospitalizadas con COVID-19 sufren un ACV antes o durante la internación.

Ese 1,8% de incidencia es relativamente alto en comparación con el porcentaje registrado en pacientes hospitalizados por otras infecciones respiratorias virales: representa el doble que para el primer SARS-CoV-1 y es ocho veces más frecuente que el reportado para gripe.

Neuquén-registra-unos-3000-casos-de-ACV-al-año.jpg

De esta manera, los autores señalaron que pese a lo alta que es, esa cifra puede estar subestimada ya que muchos pacientes mueren sin un diagnóstico confirmado y algunos no acuden al servicio de emergencias cuando experimentan síntomas leves.

El ACV asociado al COVID-19 tiene una mortalidad de entre el 35% y 45%. Ese promedio se encuentra por encima del reportado para ataques cerebrovasculares severos no vinculados a la enfermedad pandémica, que oscilan entre el 15% y el 30%. Para Sposato, el hallazgo más destacable es el vinculo en menores de 50 años. "El ACV es una forma clínica con la que pueden debutar estos pacientes. Fue el primer síntoma de COVID en el 50% de los pacientes jóvenes del estudio. Ese es, para mí, el dato más sorprendente de todos. Además, el 45% no tenía absolutamente ninguna comorbilidad ni factores de riesgo. Es como si fuera un cóctel explosivo", alertó.

El ataque cerebrovascular fue el signo inicial en uno de cada dos pacientes jóvenes. El 45% no tenía comorbilidad.

Distorsión de los olores tras el alta

En el portal Afisha, cientos de personas que se recuperaron del COVID-19 aseguraron que meses después de haber sido dados de alta por la enfermedad, siguen experimentando una una fuerte distorsión de los olores cotidianos. Muchos de los afectados señalaron que las nuevas sensaciones no se parecen a nada familiar y son muy difíciles de describir. Además, indicaron que la intensidad del malestar también varía pero en la mayoría de los casos, quienes padecen el raro síntoma concuerdan en que se trata de olores definitivamente desagradables.

Te puede interesar...

Lo más leído

Leé más

Noticias relacionadas

Dejá tu comentario