La derrota pegó fuerte en el vestuario del Albinegro

La derrota de Cipolletti como local ante Santamarina puede representar un quiebre en la actual campaña y a juzgar por las actitudes del plantel y cuerpo técnico sin dudas ha golpeado fuerte en el arranque de la campaña.

El lunes posterior fue de silencio. Christian Lovrincevich evitó las declaraciones públicas, pero prometió en los próximos días un encuentro conjunto con la prensa regional que está cerca de la campaña de Cipo, una conducta extraña dentro de la categoría y también de la institución en los últimos años.

No caben dudas que el 1-3 en contra pegó fuerte. No resulta decisivo porque a la fase regular todavía le falta muchísimo, pero los de Tandil confirmaron el retroceso individual y colectivo que el equipo de la ciudad comenzó a vivir en Bahía Blanca contra Villa Mitre.

En dos semanas consecutivas, los rionegrinos le dieron la primera victoria en el año a dos rivales que se supone serán directos en la pelea de los mismos objetivos. Pero para ilusionarse con pasar a la ronda campeonato, el equipo rionegrino deberá mejorar.

El entrenador ha cambiado mucho en la zaga central. Ezequiel Rodríguez es una fija como primer central, pero luego ha alternado con Lautaro Brienzo, Elvis Hernández y terminó el domingo en el segundo tiempo junto a Manuel Berra.

Y en el doble eje central de mediocampo, Maxi Amarfil es el único inamovible. El cipoleño inició con Berra que fue expulsado y recibió tres partidos de suspensión. Había encontrado, sobre todo de local, un socio prometedor en Guillermo Funes, pero Lovrincevich volvió a cambiar ante un rival de los bravos del grupo y lo terminó pagando caro el último domingo.

Pega el doble

Las dos caídas consecutivas pegan fuerte porque se producen en la previa a la fecha libre y al regreso será visitante en Chubut de Germinal.

Después de un arranque con números lógicos, el balance comienza a torcerse lentamente a negativo y es necesario cortar la tendencia cuanto antes para no perder confianza. Para eso será clave dar continuidad, elegir por determinadas características y darle rodaje en búsqueda de mejores rendimientos. Para un plantel totalmente nuevo, los tiempos parecen lógicos, pero los rivales juegan, la tabla de posiciones levanta temperatura y Cipolletti no debe perder protagonismo tan rápido.