Tomate Trattoria cumple un año: oda neuquina a la cocina italiana de familia
En el centro de Neuquén, Tomate Trattoria celebra su primer aniversario. Con raíces familiares, producto de calidad y espíritu de cantina moderna, se consolidó como un referente para los amantes de la buena mesa.
Por estos días, Tomate Trattoria festeja su primer año de vida. Lo hace sin estridencias, con el perfil bajo de quienes prefieren hablar a través del plato. Sin embargo, su presencia marcó una diferencia clara en la escena gastronómica neuquina: llegó a ocupar un espacio vacante, el de la cocina italiana auténtica, sabrosa, hecha con compromiso y memoria.
El restaurante, ubicado en la esquina de Entre Ríos 98, supo conquistar paladares sin grandilocuencias. En tiempos de menúes de moda y cocinas que se repiten, Tomate elige lo esencial. Es el nexo invisible que conecta a Neuquén con la tradición italiana de la mesa larga, el pan recién hecho, el aceite de oliva y la pasta bien servida.
Al frente del proyecto está Miguel “el Gaita” Enríquez, cocinero y alma del lugar, quien canaliza en cada plato la herencia de su abuela Maravilla y su madre Beatriz, mujeres que supieron montar salones, cocinar con amor y transmitir recetas con historia. De ese linaje nace Tomate. Y se nota.
El Gaita está en cada detalle: desde la elección de ingredientes hasta el diseño de los platos. Lo acompaña Gabriela Fernández, en la supervisión de la sala, coordinando con un equipo de meseras, cocineros y ayudantes de cocina que mantienen en marcha la experiencia Tomate con precisión y calidez. Juntos forman una dupla que equilibra hospitalidad, oficio y coherencia.
El salón tiene detalles que remiten a la “patria tana”: fotos familiares, cocina semiabierta, cava de vinos a la vista y una panera que ya anticipa lo que vendrá: baguette de masa madre, focaccia y alguna sorpresa más.
Una carta amplia, fresca y honesta de cocina Italiana
La carta es generosa y versátil, pensada para quienes buscan tanto una comida de paso como una celebración prolongada. Las pastas, claro, son protagonistas absolutas. Hay pasta del día —con propuestas que cambian según la jornada—: martes de pasta al huevo, miércoles de ravioli, jueves de sorrentinos y viernes sorpresa. Pero también hay una sección fija, con opciones para todos los gustos.
Desde spaghetti, tagliatelle y pappardelle hasta más de quince salsas posibles, cada combinación remite a una trattoria del sur de Italia. Y la pasta rellena —escuela de la casa— es un capítulo aparte: cappellacci caprese, ravioles Gennaro, sorrentinos Amalfi, pasta de pera y queso azul, tortelloni, gnocchi rellenos y más. Cada plato está bien ejecutado, con técnica y corazón.
Los risottos merecen mención especial: el de hongos, el de pulpitos del Golfo San Matías y el clásico pomodoro son tres joyas del menú. Todos con buen punto de cocción y esa textura cremosa que exige el plato.
En los principales, el menú ofrece un recorrido por sabores criollos con acento italiano: lasaña de berenjenas, ojo de bife grillado, milanesa, trucha patagónica y merluzón con almejas. También hay antipastos clásicos: anchoas en focaccia, provoleta a la plancha, olivas rellenas, langostinos con panceta, y una mozzarella in carrozza frita con salsita de tomate y peperoncino.
Productos con nombre y apellido
Uno de los secretos de Tomate es el respeto por el producto. El aceite de oliva es patagónico; los tomates, cuando están en estación, llegan desde chacras orgánicas de Centenario. Los pescados y mariscos provienen del Atlántico bonaerense, rionegrino y chubutense, con trazabilidad garantizada gracias al trabajo conjunto con Puerto Marisco, pescadería de calidad de la capital neuquina.
La carta de vinos también acompaña la propuesta: no es extensa pero está bien curada, con presencia de varias regiones vitivinícolas argentinas y cepas elegidas para maridar con cada plato.
Y como buen cierre de comida italiana, no faltan los postres: tiramisú, flan, chocotorta, pannacota y, en época de membrillos, un delicioso vigilante con queso y frutos secos.
Abierto todo el año
En un país donde sostener un proyecto gastronómico de calidad no es tarea fácil, Tomate abre de lunes a lunes, al mediodía y por la noche, con un servicio siempre atento y cuidado. Gabriela y el Gaita, junto a un equipo que trabaja desde temprano poniéndolo todo, pilotean este barco con firmeza, dedicación y una convicción clara: cocinar bien, con producto y con identidad, sigue siendo posible.
Tomate Trattoria cumple un año. Y en ese tiempo logró algo difícil: convertirse en un clásico sin necesidad de proclamarse como tal.
+ Info:
Entre Ríos 98, Neuquén
Lunes a lunes: 12:30 a 15:30 y 20:30 a 24 hs
Instagram: @tomate_trattoria
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