Forense y psicólogas complicaron al boxeador Marangel

Durante la segunda jornada del juicio por jurado popular contra Orlando Marangel Ademar, acusado de haber violado y mantenido cautiva a su pareja en Rincón de los Sauces, se escuchó el testimonio de varios profesionales y de algunos vecinos del propio boxeador. Cuenta con una condena previa por haber golpeado a Fernanda Pereyra en 2015.

"Para la querella representada por Joaquín Hertzriken Catena y Marcelo Hertzriken Velasco, fue una buena jornada de producción de pericial de buena calidad corroborante de la acusación", indicaron a LM Neuquén los querellantes al término de la jornada de juicio de este miércoles.

Por su parte, el fiscal jefe Pablo Vignaroli prefirió no adelantar conjeturas sobre la prueba ofrecida por la defensa, aunque confió que espera que el jurado popular dicte un veredicto de culpabilidad respecto a los delitos que le atribuyó a Marangel.

Cabe indicar que es juzgado por los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de armas; tenencia ilegal de arma de guerra, privación ilegal de la libertad agravada y amenazas agravadas por el uso de armas. Es que, además, de los hechos contra quien era su pareja, también se lo juzga por haber amenazado a empleados de un supermercado y por tener un arma de fuego sin la debida autorización legal.

Entre los 10 testigos que pasaron por el estrado este miércoles, se encuentran tres psicólogas -quienes entrevistaron a la víctima y al acusado-, una médica forense -quien examinó a la víctima y el acusado- y conocidos del acusado, que viven en cercanías a su domicilio y dieron cuenta de lo que pudieron observar sobre lo ocurrido ese fin de semana del 8 al 10 de mayo de 2020, cuando cometió los hechos contra la joven.

Ahora, ya finalizada la etapa de reproducción de prueba, mañana jueves se realizarán los alegatos de clausura de cada una de las partes y luego se dictarán las instrucciones al jurado popular para que delibere. Previo a ello, el acusado tendrá la oportunidad de declarar si así lo quisiera.

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