Escándalo: acusan a Evo Morales de tener una hija con una menor
El expresidente boliviano enfrenta graves acusaciones de estupro y trata de personas, en un caso que involucra a una joven de 15 años.
El exmandatario boliviano Evo Morales enfrenta nuevas acusaciones que lo sitúan en el centro de una investigación por supuestos delitos de estupro y trata de personas. La investigación se basa en un caso que involucra a una joven con quien Morales habría mantenido una relación cuando ella tenía 15 años.
Este caso, que se remonta a su tiempo como presidente, está generando un gran revuelo en Bolivia y reaviva viejas polémicas sobre Morales y su comportamiento en el ámbito personal.
El miércoles pasado, la fiscal del departamento de Tarija, Sandra Gutiérrez, emitió una orden de captura en su contra, que fue rápidamente revocada tras una acción de libertad presentada por su equipo jurídico. Morales, quien gobernó Bolivia entre 2006 y 2019, ha respondido públicamente a las acusaciones, denunciando que es víctima de una persecución política.
Detalles del caso y la orden de captura
La acusación central sostiene que en 2014 Morales habría conocido a Cindy S.V.P., entonces una joven de 14 años, cuando su familia la inscribió en una organización juvenil creada por el expresidente. Según la investigación, la familia de la joven buscaba obtener beneficios políticos y económicos, lo que habría llevado a una relación forzada entre Morales y la adolescente.
El informe de inteligencia que respalda estas afirmaciones detalla que la menor quedó embarazada, y en 2018 se registró el nacimiento de una hija en la localidad de Yacuiba. Morales aparece como el padre de la niña en la partida de nacimiento. Este hecho es clave en la causa, ya que establece que la relación comenzó cuando la joven tenía 15 años, un hecho que, de confirmarse, podría agravar las acusaciones en su contra.
La orden de aprehensión describía a Morales como un peligro potencial para la investigación, señalando que, debido a su extensa trayectoria política y su red de influencias, podría obstaculizar la justicia. Además, se mencionaba la posibilidad de que el exmandatario intentara fugarse del país, dado que no tiene un domicilio fijo ni una actividad laboral establecida. Este contexto llevó a la Fiscalía de Tarija a solicitar su captura por los delitos de estupro y trata de personas.
La revocación de la orden y las reacciones
A pesar de la gravedad de las acusaciones, la orden de captura fue anulada tras la intervención de los abogados de Morales. Estos presentaron una acción de libertad que fue rápidamente concedida por el tribunal, lo que permitió a Morales eludir la aprehensión por el momento.
El expresidente, en sus redes sociales, reaccionó con dureza ante las acusaciones, declarando que no tiene miedo y que este tipo de persecuciones no son nuevas para él. Según Morales, estos ataques provienen de sectores neoliberales que buscan silenciarlo. Su equipo legal también ha señalado que este caso es parte de una estrategia política para debilitar su imagen y frenar su posible candidatura en las elecciones de 2025. En el fondo, el conflicto parece estar ligado a la lucha interna dentro del Movimiento Al Socialismo (MAS), donde Morales y el actual presidente Luis Arce están en pugna por el control del partido.
Antecedentes y otras vinculaciones
Este no es el primer caso en el que Evo Morales es relacionado con menores de edad. En 2016, salió a la luz su relación con Gabriela Zapata, una joven con quien habría tenido un hijo cuando ella tenía 18 años. Zapata ocupó más tarde un alto cargo en una empresa china que mantenía contratos multimillonarios con el gobierno de Morales, lo que generó un gran escándalo en Bolivia. Aunque Morales admitió la relación, el caso afectó seriamente su reputación.
Otra controversia surgió en 2020, cuando imágenes y videos de Morales con Noemí M., una adolescente que habría mantenido una relación con él desde que tenía 14 años, se hicieron públicos. Según informes policiales, la joven habría viajado varias veces a encontrarse con Morales en México y Argentina, donde él se encontraba asilado tras dejar la presidencia.
Las recientes acusaciones añaden otra capa de complejidad a la figura de Morales, quien continúa siendo una figura clave en la política boliviana a pesar de los numerosos escándalos y controversias que lo rodean. Mientras su equipo legal y político se prepara para defenderlo, la sociedad boliviana observa de cerca el desenlace de este nuevo capítulo en la vida del exmandatario.
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