Daniel Sancho, hijo de un famoso actor, recibió cadena perpetua por el brutal crimen de un cirujano colombiano con el que mantenía relación.
Un tribunal de Tailandia condenó a cadena perpetua al conocido chef español Daniel Sancho, de 30 años, tras declararlo culpable del asesinato y descuartizamiento del médico colombiano Edwin Arrieta, un hecho que tuvo fuerte repercusión tanto por los nombres de los involucrados como por el horrendo crimen.
Sancho, un chef con cierta fama que divulgaba sus recetas a través de las redes sociales, es hijo y nieto de los actores españoles Rodolfo Sancho y Sancho Gracia. Arrieta (44), en tanto, era un cirujano plástico de gran presencia en Colombia.
El crimen ocurrió en la turística isla de Koh Phangan
El asesinato ocurrió el 2 de agosto del año pasado en la paradisíaca isla de Koh Phangan, donde ambos pasaban sus vacaciones, y Sancho estaba detenido desde ese momento.
El tribunal no sólo lo acusó de asesinato premeditado, sino también lo declaró culpable de hacer desaparecer los documentos y el cuerpo de la víctima tras descuartizar el cadáver.
Además, el condenado también deberá pagar una indemnización de 106.000 dólares a la familia de la víctima, que batalló por esta condena ejemplar.
Cómo fue el horrendo crimen
Sancho y Arrieta se conocieron a través de las redes sociales y entablaron amistad rápidamente. Viajaron a Tailandia en agosto de 2023, para disfrutar de sus playas.
Según los medios españoles, Arrieta le habría prestado una importante suma de dinero a Sancho. Poco a poco la relación se volvió conflictiva.
Arrieta le habría prestado una gran suma de dinero a Sancho
En su testimonio, Sancho afirmó que Arrieta lo venía presionando para mantener una relación sentimental, a la que él se oponía en un principio.
También contó a la agencia EFE que había sido un “rehén” de Arrieta y lo acusó de estar obsesionado con él. “Me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho”, dijo.
El 2 de agosto, los dos hombres se alojaron en un resort en la isla de Koh Phangan. Después de que ambos compartieron varios días juntos disfrutando de la gastronomía y las atracciones turísticas de Koh Phangan, el colombiano desapareció repentinamente.
De acuerdo a la confesión de Sancho, durante la famosa fiesta de luna llena, lo atrajo a Arrieta a su habitación, donde ocurrió el crimen.
Sancho admitió que asesinó a Arrieta, pero que fue durante una pelea. Sin embargo, los fiscales argumentaron que los actos posteriores —el desmembramiento del cadáver y la dispersión de los restos en bolsas de basura por la isla— demostraban una planificación meticulosa.
Sancho descuartizó el cadáver y lo separó en 14 bolsas
Sancho descuartizó el cadáver del cirujano y separó las partes en 14 bolsas. Algunos restos de Arrieta fueron descubiertos en una playa de la isla por un residente local, quien alertó a las autoridades.
Pronto, los investigadores encontraron más partes del cuerpo en diferentes ubicaciones de Koh Phangan, lo que llevó a un despliegue masivo de la policía para reunir las evidencias y rastrear al responsable. Días después, Sancho fue detenido y, tras varias horas de interrogatorio, confesó el crimen.
La prisión en Tailandia
Se trata de uno de los crímenes más mediáticos que se recuerdan en España, con la singularidad de que tuvo lugar a más de 10.000 kilómetros de distancia.
Durante la lectura del veredicto, el juez señaló que en realidad Sancho iba a ser condenado a la pena de muerte, pero que se redujo porque el chef colaboró en desentrañar el caso.
Ahora su defensa apelará, pero ya se especula con la cárcel donde iría a parar. Fuentes judiciales tailandesas dijeron a los medios españoles que podrían trasladarlo a la prisión de Nakhon Si Thammarat, en la cercana provincia del mismo nombre, que cuenta con más de 4.200 reclusos hacinados en sus celdas.
Sancho podría terminar en una de las cárceles más pobladas de Tailandia
En el centro penitenciario de Samui, donde Sancho ha estado el último año en prisión provisional, encerrado en el módulo hospitalario, apenas hay 500 presos.
Otro destino puede ser la también la prisión de máxima seguridad de Bang Kwang, al norte de Bangkok. Es uno de los centros penitenciarios más hacinados del país, superando los 8.000 presos a pesar de que se construyó para albergar a no más de 3.500 reos.
Allí suelen llegar a los condenados a muerte y reclusos que cumplen largas sentencias.
Te puede interesar...
Lo más leído
Dejá tu comentario