Alumnos, profesores y familiares despiden con dolor a Carlos, un estimado profesor cipoleño que dejó un legado imborrable y "siempre andaba con una sonrisa".
Conmueve la sincera y profunda angustia de sus queridos alumnos en la puerta de la sala velatoria. Esos abrazos interminables de los adolescentes, entre lágrimas, con los familiares y los docentes en la medida que van llegando en elevado número al recinto de Teniente Ibáñez 1055.
Escenas de extrema tristeza y dolor se reiteran en Diniello, donde en medio de la congoja generalizada decenas de vecinos se acercan para darle el último adiós a Carlos De Gracia, el estimado profesor del CET 9 que falleció en la madrugada de este jueves de manera repentina.
Se emociona durante sus declaraciones a LM Cipolletti la directora Stella Roche. “La comunidad educativa del CET 9 atraviesa un profundo dolor ante la irreparable pérdida por lo que significa Charly para toda la escuela. Un profesor que trabajaba hace muchos años en la entidad, muy querido y comprometido con la institución”, señaló la máxima autoridad de ese establecimiento con la voz entrecortada.
“Con un gran don humano y profesionalismo y entrega. Muy querido. Enseñaba con el ejemplo, con la palabra, con cada acto. Un dolor increíble porque es algo inesperado, abrupto, sin palabras”, destacó las virtudes del docente que partió de este mundo de un momento a otro.
Seguidamente informó que tras el día de duelo, mañana habrá que retomar la actividad con todo el dolor a cuestas. “La normativa docente establece día de duelo el día del fallecimiento para acompañar a la familia y a partir de mañana está a disposición el Programa ‘Te Cuido, Nos Cuidamos’ para trabajar con los docentes, sus compañeros y fundamentalmente contener a los estudiantes que tanto lo querían”, agregó Roche con sus ojos humedecidos.
A su lado, otra autoridad, Mariela Martínez recordó que Charly daba “la materia termodinámica y prácticas profesionalizadas” en el colegio, además de ser “coordinador de clases”.
También muy angustiada, lo describió como un “gran compañero, un histórico con casi 30 años de trayectoria en la escuela, con un acercamiento especial con los chicos, tan propio de él. Siempre compartía viajes, salidas, fiesta de egresados, siempre era uno de los docentes más elegidos para la entrega de diplomas por los chicos. El amor y el compromiso hacia el CET 9 era gigante y ese es su legado”.
Por su parte, Norma Manrique, quien estaba junto a ellas, sabe que lo que viene no será fácil, que la ausencia de un ser tan identificado con el CET 9 y sumamente valorado y apreciado se va a notar. Que se lo va a extrañar en demasía. “Nos va a llevar tiempo asimilar esta pérdida irreparable para la escuela”, reflexionó con tristeza infinita.
"El profe nos hacía bromas cuando iba a la cocina y aconsejaba a los chicos"
Las trabajadoras y trabajadores de servicio y mantenimiento, que formaban un grupito aparte en la vereda, también lo despiden al borde del llanto y con afecto. “Siempre aconsejaba a los chicos que sigan estudiando, que no abandonen. Como compañero era divertido, siempre apoyaba. Excelente persona y profesor. Lo recordaremos con un sonrisa, nos hacía bromas cuando iba a la cocina”, dijo una de las compañeras de Carlos De Gracia.
En tanto, sus alumnos estaban demasiados apenados y sin ánimo para brindar testimonio.
Al querido Charly hoy lo llora todo el CET 9 pero seguirá presente en ese establecimiento educativo por su enorme aporte, empatía y dedicación. Un profe con todas las letras que ya vuela alto. El maestro del pueblo no morirá nunca en el corazón de los estudiantes que tanto lo idolatran.
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