Robo a Naldo: echan del país a uno de los boqueteros chilenos
Cumple 3 años en la cárcel cipoleña y deberá volver a su país. Junto a un cómplice robó en la tienda de electrodomésticos.
Otro delincuente extranjero fue expulsado del país por disposición de la Justicia rionegrina. En los últimos días, se extraditó a dos personas a sus respectivos países donde continuarán cumpliendo condena.
Hace pocos días fue Esmeraldo Florentin Bedoya, un ciudadano paraguayo que cumplía 6 años de prisión por el intento de homicidio de una mujer en una toma cercana a Costa Norte.
Ahora le impusieron una medida similar al ciudadano chileno Jhon Paul Araneda Veloso, quien cumple una condena de tres años de prisión en el Establecimiento Penal 2 de Cipolletti por haber entrado a robar junto a un cómplice a la sucursal local de Naldo y por intentarlo en la joyería Scorpio.
El trámite, técnicamente “extrañamiento”, fue resuelto también por el juez de Ejecución Penal, Lucas Lizzi, por requerimiento de la Dirección Nacional de Migraciones, desde donde se declaró irregular la permanencia de Araneda Veloso en Argentina y prohibió su reingreso de forma permanente.
El último miércoles se realizó la audiencia en la que el mismo delincuente estuvo de acuerdo con su expulsión. Su defensor también la avaló, y sostuvo que en octubre del año pasado cumplió la mitad de la sentencia, por lo que estaba en condiciones de ser despedido hacia su país de orígen, Chile.
Mientras que la fiscalía no presentó objeciones y aclaró que el condenado no posee nuevas causas penales ni pedidos de detención.
Agujeros en el techo
Araneda Veloso y su compañero Víctor Villalobos Gutiérrez, también chileno, fueron detenidos por el robo cometido a la tienda de electrodomésticos Naldo, ubicada en San Martín 336, y a la joyería Scorpio, en Yrigoyen 261, ambos comercios del centro de Cipolletti.
El primero de los hechos ocurrió la noche del 19 de marzo de 2022. Los ladrones abrieron un agujero en las chapas de zinc y accedieron al depósito, donde cortaron los cables de la sirena de la alarma y los de las cámaras de seguridad. Luego se apoderaron de decenas de teléfonos celulares, unas cinco notebooks, varias tablets y smartwatch (relojes inteligentes) y la mochila de un empleado. En ese entonces se estimó que el botín superaba los 2 millones de pesos.
Dos días después intentaron ingresar mediante la misma técnica boquetera a la joyería, pero no pudieron anular la alarma, que al activarse debieron escapar. En la urgencia por no ser atrapados dejaron una mochila, que resultó ser la del trabajador de Naldo, elemento que los vinculó a los dos atracos.
Los investigadores abocados a los casos llegaron hasta los autores por diversas evidencias que lograron en la pesquisa. Las más relevantes fueron imágenes de cámaras de seguridad recabadas en la zona céntrica y también el aporte de la Policía de Neuquén y un rastreo por redes sociales. Los atraparon en abril de ese año en una vivienda propiedad de "Chiqui" Forno, el líder de la megabanda que purga 33 años de cárcel.
Ambos hombres fueron a juicio imputados por “robo agravado por escalamiento” y “robo agravado por escalamiento en grado de tentativa”.
La fiscalía y los abogados defensores consensuaron cerrar la causa en un proceso abreviado, que requirió que la confesión del dúo de ladrones, a cambio de recibir una pena atenuada.
El acuerdo estableció para Araneda Veloso tres años de prisión efectiva, porque si bien no registraba antecedentes penales en Argentina, si los tenían en Chile.
Mientras que para Villalobos Gutiérrez le correspondió cuatro años y tres meses de cárcel porque en 2015 había sido condenado a dos años de prisión en Chubut.
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