Reconstruyeron un ancestro del cocodrilo que vivió en Argentina
Científicas del Conicet analizaron los huesos del ornitosúquido, de 225 millones de años.
Un grupo de investigadores del Conicet(Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) reconstruyó el esqueleto de un antepasado del cocodrilo que vivió en la Argentina hace 225 millones de años.
El intenso trabajo fue llevado a cabo por las científicas Julia Brenda Desojo, de la Facultad de Ciencias Naturales y del Museo de La Plata, y Belén von Baczko, del Museo Argentino de Ciencias Naturales. Juntas se encargaron interpretaron los huesos de un ornitosúquido, un reptil que dio origen a los cocodrilos a pesar que en un momento lo relacionaron con los dinosaurios. En un principio, las especialistas reconstruyeron en un 90% el esqueleto de la especie Riojasuchus tenuisceps a partir de los restos de cuatro ejemplares encontrados a fines de 1960 en la formación Los Colorados de La Rioja. "Eran animales terrestres de hábitos carnívoros carroñeros. Es decir, comían restos de cadáveres sin ser cazadores. Eran cuadrúpedos aunque, probablemente, se paraban sobre sus patas traseras para correr. Medían alrededor de dos metros de longitud y tenían una cabeza muy particular con un hocico en forma de punta y curvado hacia abajo", precisó Von Baczko.
Las coautoras del estudio coincidieron en que "era realmente necesaria una descripción detallada y actualizada" del animal extinto ya que la única que había hasta ahora era la presentación original de la especie que hizo el paleontólogo autodidacta José Bonaparte, en 1972. Desde entonces, se han descubierto muchos otros reptiles.
Además del Riojasuchus, en Argentina se conoce una segunda especie llamada Venaticosuchus rusconii. Esta fue encontrada en la Formación de Ischigualasto, también en la provincia ubicada en el noroeste del país. A ellas sólo se les suma a nivel mundial una tercera que corresponde a un ejemplar descubierto a comienzos de 1900 en Escocia. "Con restos fósiles aparecidos únicamente en dos países hoy tan distantes, alcanza para inferir que la dispersión geográfica de estos reptiles fue muy amplia en Pangea, el súpercontinente único", indicó Desojo.
A esto se le sumó el descubrimiento de un nuevo ejemplar de un ornitosúquido distinto a los anteriores, en Brasil. Su descubridor fue el investigador de la Universidad Federal de Santa María Rodrigo Muller y contactó a las especialistas argentinas. Además de bien preservado, el esqueleto resultó estar muy completo: hay numerosos huesos del cráneo y la mandíbula, varias vértebras pertenecientes al cuello, el tronco, la cadera y la cola; y las patas delanteras y una de las traseras casi íntegras.
Fósil del familiar de un perezoso
En el Paraje La Paloma, ubicado en la localidad bonaerense de Coronel Pringles, hallaron los restos fósiles de un animal de la familia de los perezosos terrestres que podría tener entre 8000 y hasta 24.000 mil años de antigüedad. Los huesos descubiertos son del cráneo y parte del esqueleto.
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