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La Mañana China

Un joven chino tenía nueve dedos en un pie

Los padres nunca lo quisieron operar porque un adivino les dijo que el mal les traía suerte.

Un joven chino, de 21 años, nació con nueve dedos en el pie izquierdo y luego de que sus padres no le permitieran hacerse una intervención quirúrgica, tomó la decisión de operarse y le sacaron los dedos adicionales. Sus papás lo obligaron a permanecer con la deformidad por superstición.

El muchacho, llamado Ajun, padeció polidactilia, el mal de tener dedos adicionales, y contó que pasó su infancia evitando interacciones sociales ya que estaba demasiado avergonzado. De hecho, siempre ocultó sus extremidades inferiores. A partir de esto, y tras sentirse “inútil e imperfecto”, tuvo una vida de apartamiento y de pocas amigos. “Nunca pensé que encontraría a alguien que quiera estar conmigo”, agregó. En tanto, sus padres no ayudaban al caso: no quisieron que le quitaran los dedos del pie anormales porque un adivino les afirmó que eran un buen augurio. “Eran supersticiosos, lo creían un regalo del cielo. Pensaron que si realmente se veía tan mal, podría cubrirlo con mis zapatos”, comentó el asiático.

“Mis padres eran supersticiosos, lo creían un regalo del cielo. Pensaron que si realmente se veía tan mal, podría cubrirlo con mis zapatos”. “Nunca pensé que encontraría a alguien que quiera estar conmigo, me sentía inútil e imperfecto. Ahora me siento genial, creo que mi pie es perfecto”. Ajun, Joven chino que sufrió de polidactilia

Tras convertirse en un adulto, el ciudadano de Lufeng, en el sur de China, tomó valentía, decidió deshacerse de la deformidad y buscó ayuda médica. Las fotografías y las radiografías de su preoperatorio del pie mostraron a los médicos la gravedad de la deformidad: dígitos más pequeños brotaron entre sus dedos normales en lugares extraños, carecía del dedo gordo del pie y en su lugar, aparecieron dos dedos más pequeños.

El doctor Wu Xiang, del Hospital Quirúrgico Shunde Heping, en Foshan, comentó: “Es muy raro ver una deformidad tan grave que no haya sido tratada en un paciente de 21 años”. Su equipo pasó nueve horas operando a Ajun, forjando un nuevo dedo gordo del pie y cortando los extras. “Otros hospitales habrían eliminado sus dedos extra externos. Esa habría sido la solución más fácil, pero no se vería mejor. Su dedo del pie más natural está en el exterior, por lo que decidimos migrarlo hacia adentro a su posición más ideal, reemplazando su quinto dígito y creando un nuevo dedo gordo’, explicó el especialista. Asimismo, enfatizó que “lo mejor para los niños nacidos con deformidades es que sean examinados tres meses después del nacimiento”. “La cirugía puede hacerse al año de edad, pero no más allá de los seis años. Básicamente, cualquier momento antes de que comiencen la escuela está bien. Esto es mejor para el bienestar psicológico del niño, pero las operaciones anteriores también conducen a mejores resultados de recuperación”, sostuvo.

El joven, quien se está recuperando en el hospital y será dado de alta en las próximas semanas, se sinceró: “Ahora me siento genial. Estoy muy agradecido al doctor Wu Xiang. Creo que mi pie es perfecto. Me mostró fotos después de la cirugía y estoy muy feliz”.

Se cortó un dedo innecesariamente

En la localidad de Shangyu, de la provincia china de Zhejiang, un granjero se amputó el dedo luego de recibir la mordida de una serpiente que según la versión popular mata “después de dar cinco pasos”. El hombre, de 60 años, fue al hospital y le dijeron que era un mito, que ese ejemplar no tiene veneno. Encima, el señor perdió en el pasto su dedo y no se lo pudieron volver a implantar.

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