Polémica en Rosario Central por una táctica de Malcorra para poder jugar contra Independiente y San Lorenzo

En el fútbol argentino, la estrategia de “limpiarse” con una quinta amarilla para llegar sin sanciones a partidos clave no es novedad. Sin embargo, el episodio protagonizado por Ignacio Malcorra en el encuentro entre Rosario Central y Platense por la fecha 13 del Torneo Apertura elevó esa táctica a un nuevo nivel de sutileza y picardía, al punto que muchos se preguntan si no estamos frente a uno de los casos más evidentes —y al mismo tiempo más insólitos— de los últimos tiempos.

El mediocampista ofensivo del Canalla no fue titular en el partido disputado en Vicente López. De hecho, ni siquiera ingresó al campo de juego. Sin embargo, Malcorra fue amonestado desde el banco de suplentes por protestar enérgicamente tras una fuerte infracción cometida por Oscar Salomón, defensor de Platense, contra Franco Ibarra.

Ignacio Malcorra se hizo amonestar y generó polémica

La jugada fue dura, al punto que el jugador de Central quedó tendido tras recibir un golpe en la cabeza. La reacción airada del banco auriazul no tardó en llegar, y entre los más vehementes estuvo Malcorra, quien ya contaba con cuatro amarillas acumuladas en el torneo.

La escena fue llamativa: Pablo Echavarría, árbitro del encuentro, tras recibir la señal del cuarto juez, se acercó directamente al banco y le mostró la tarjeta amarilla a Malcorra. Fue la quinta del certamen y, por ende, la suspensión automática por una fecha. Lo curioso —y lo que levantó sospechas— es que el volante de 37 años no tuvo participación en el encuentro y, según explicó luego Ariel Holan, DT de Central, tampoco tenía muchas chances de ingresar: "La cancha estaba dura y él viene arrastrando una fatiga muscular", declaró el técnico, que también afirmó que si el partido lo hubiese requerido, Malcorra estaba a disposición.

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Ignacio Malcorra terminó amonestado de manera muy conveniente

Qué dijo Ariel Holan sobre la amarilla a Nacho Malcorra

La jugada, que para muchos fue una movida estratégica encubierta, tiene lógica desde el punto de vista deportivo. Rosario Central ya está clasificado a los playoffs del torneo, y tras el cruce ante Instituto —que el ex Unión y Lanús no jugará—, le esperan dos partidos determinantes en la lucha por el primer puesto de la Zona B: ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro y frente a Independiente en el Gigante de Arroyito. Ganar el grupo le permitiría al Canalla disputar en casa los mano a mano desde octavos hasta semifinales, un beneficio nada menor en esta edición del Apertura.

Consultado por la prensa sobre el accionar de su jugador, Holan optó por bajarle el tono al asunto: “Si era imperioso que ingresara lo iba a hacer, pero el equipo lo estaba haciendo bien y consideramos que era un riesgo que jugara”, dijo. Y sobre la tarjeta, simplemente lanzó una sonrisa y evitó ahondar en detalles, como quien deja que el rumor se disipe solo.