Escrache a Macron en el teatro

París vivió una nueva jornada de incidentes con los chalecos amarillos que volvieron a protestar en las calles y a chocar con la Policía, aunque los disturbios comenzaron unas cuantas horas antes, más precisamente en la noche del viernes, cuando una salida social al teatro de la pareja presidencial (Emmanuel Macron y su esposa Brigitte) fue empañada por un escrache de decenas de personas que intentaron copar el edificio en el que se encontraba el Presidente. Incluso, unas horas después, descargaron su furia incendiando el restaurante Le Rotonde, uno de los lugares favoritos de Macron para ir a cenar.

Todo comenzó cuando los manifestantes se concentraron en la puerta del teatro de las Bouffes du Nord, donde el jefe de Estado había ido a ver la obra “La Mouche”. En un momento, un grupo intentó tomar el hall del teatro con la idea de entrar en la sala, obligando a la intervención policial que los echó

del lugar. Igualmente, por prevención, la custodia de Macron evacuó del lugar al Presidente aunque, una vez recuperada la calma, pudo regresar a ver la obra. Por este tema resultó detenido un periodista, afín a la opositora extrema izquierda, Taha Bouhafs, quien se encontraba por casualidad en la misma sala de teatro a la que fueron Macron y su esposa y comenzó a tuitear, arengando a la gente y hasta amenazando con revolearle un zapato al Presidente.

La salida del lugar de Macron fue acompañada por silbidos de los manifestantes que mostraban consignas como “Estamos aquí, estamos aquí. Incluso si Macron no quiere, estamos aquí”, “Todos juntos, huelga general”, “Macron, renunciá”. Mientras, voceros del Presidente señalaron que “continuará yendo al teatro como acostumbra hacerlo velará para que la libertad de expresión, la libertad de los artistas y la libertad de creación no se vea perturbada por acciones políticas”.

La tensión se trasladó un rato después al restaurante La Rotonde, cuyos vidrios de entrada fueron rotos por manifestantes, quienes arrojaron una bomba molotov e iniciaron un incendio que fue controlado por los bomberos. Aun así, el fuego provocó importantes daños dentro del restaurante que posiblemente deba permanecer algunas semanas. La fiscalía de París abrió una investigación y la principal hipótesis es “ir tras la pista criminal”, dijo una fuente judicial.