Los amigos cerveceros que se unieron por el sueño de fabricar su propia birra

En medio del boom de las cervezas artesanales en la región, Joan Guglielmucci y Julian Pesci comenzaron a incursionar en el rubro y, luego de los halagos de familiares y amigos -que en esos inicios los acompañaron degustando su producción-, decidieron unirse, dejar atrás sus respectivos trabajos y jugárselas por el sueño de tener su propia fábrica de cerveza, hoy llamada Mr. Hops.

El emprendimiento surgió hace seis años. Joan acababa de regresar a Neuquén luego de probar suerte en Córdoba con un local de pollo frito. Julián estaba abocado al trabajo de campo en una petrolera y, cautivado por el conocimiento y la experiencia de un excompañero de trabajo que actualmente vive en la cordillera, comenzó a meterse en el universo cervecero junto a su socio.

"Esto fue hace seis años, cuando estaba empezando el boom, ya había bastantes cervecerías grandes", contextualizó Julián. "La cuestión es que nos metimos en todo esto como un hobby, en paralelo con nuestros laburos. Como a nuestros familiares y amigos les empezaba a gustar cada vez más, nos fuimos perfeccionando, hicimos muchas capacitaciones y en ese proceso nos dimos cuenta que para producir en cantidad y calidad había que invertir. Así que empezamos a buscar algunos créditos, conseguimos a tasas súper altas, pero nos ayudaron muchísimo. Y logramos tener la habilitación provincial en 2017", destacó.

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Agustin Martinez

Con el emprendimiento andando sobre ruedas, ambos decidieron dejar sus trabajos y enfocarse de lleno en la actividad, acordando una división de tareas. Mientras Julián tomó las riendas en la producción, Joan concentró sus esfuerzos en la gestión, el contacto con los clientes y la comunicación del proyecto a través de las redes sociales.

"Tratamos de cumplir un 50-50 pero nos complementamos en las dos cosas", destacó Julián. "Este es un aprendizaje constante, de todos los días. Tener a alguien con la confianza de una amistad, te permite irte de viaje por algún motivo, sabiendo que el otro se va a hacer cargo de la fábrica. Te da una tranquilidad enorme porque solo realmente es imposible. Es un trabajo enorme", subrayó.

A la hora de hablar de la evolución de Mr. Hops, Joan consideró: "Lo más difícil del rubro es la parte de la maquinaria, nos costó mucho incrementar el volumen en litros; pero bueno, fue año a año. Hoy en día estamos haciendo 4500 litros mensuales".

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"Nosotros no tenemos la idea de producir 10 mil litros mensuales. Tenemos la idea de estabilizarnos en cinco mil o seis mil, siempre manteniendo la calidad porque no vendemos cerveza que no nos guste. La idea no es llegar a ser una fábrica industrial al día de mañana, sino mantenernos en los niveles que podamos y vender una calidad de cerveza que sea inigualable" acotó, antes de destacar que actualmente están dedicados al desarrollo de cervezas lupuladas en la variedad IPA y APA.

"Eso es lo que tratamos de hacer diferente del resto de las fábricas: especializarnos en dos estilos", remarcó Julián. "Siempre tratamos de mejorar la calidad, siempre pensamos que la podemos hacer mejor, eso nos marca la diferencia con otras cervecerías. Nunca nos centramos en los litros a producir, sino en la calidad. Jamás sacamos a la venta una mala tirada, cuidamos la calidad y la higiene dentro de la fábrica", sumó por su parte Joan. "Nosotros tratamos que nuestra cerveza tenga buen aroma, buen gusto y buena espuma", remarcó su compañero.

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Mr. Hops se puede conseguir en los carritos gastronómicos ubicados en la Isla 132 del paseo costero de Neuquén y en algunos bares y locales de la ciudad como California, Fried Chicken House y Mc Fly.

Aunque no tienen un ida y vuelta directo con el público, Julián y Joan advierten la buena aceptación que tiene su propuesta por la demanda del mercado. "La recepción se siente porque todos los locales nos siguen pidiendo cerveza", sostuvo Joan.

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Consultados sobre si es complicado posicionarse en un rubro muy desarrollado en la zona, Julián señaló. "No tenemos problema porque abastecemos a una parte de Neuquén que nadie abastece. El mercado da para todo. Somos una fábrica chiquita que recibe pedidos de lugares de Neuquén, Plaza Huincul y otras localidades de la provincia. Hoy las fábricas grandes están exportando y enviado a Buenos Aires. Así que en ese sentido no tenemos problemas. Si tuviéramos para producir el doble, estaríamos vendiendo el doble", aseguró, para luego subrayar que recientemente comenzaron a enlatar sus cervezas por cuenta propia, lo que también los distingue de otros productores.

"Este año tuvimos la posibilidad de comprar una enlatadora isobárica y dejamos de tercerizar este servicio. Eso nos permite tener mayor alcance. Con el barril llegábamos a un solo lugar. En cambio, ahora podemos llegar también a supermercados y mercados chiquitos. Las latas también se pueden pasar a retirar por la fábrica. Recién estamos empezando pero estamos apostando fuerte a eso porque sabemos que tiene una mejor calidad, el botellón se está usando muy poco, el tema de la recarga se está quedando un poco afuera", enfatizó Joan.

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