Imputan a Nardanone y Sesnich por la desaparición de Sergio Ávalos
Lo confirmaron a LMN fuentes oficiales. Además, serán imputados todos los integrantes de la seguridad de Las Palmas. Es un hecho histórico.
El juez federal Gustavo Villanueva, a cargo de la causa por la desaparición forzada de Sergio Ávalos, concretada el 14 de junio de 2003 en el boliche Las Palmas, libró un oficio en el que le brindó instrucciones a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) para que notifique del llamado a indagatoria y designación de abogado defensor a Pedro Nardanone y Patricio Sesnich, dueño y encargado del local al momento de la desaparición. Además, la medida alcanza a todo el personal de seguridad de Las Palmas.
En el marco de la causa caratulada “N.N. s/privación ilegal de la libertad agravada", se libró en los primeros días del año la solicitud a la PSA en la que se indica "tenga a bien proceder a la ubicación y notificación de las personas que a continuación se detalla que han sido convocados en audiencia para prestar declaración indagatoria a tenor de lo normado por el artículo 294 del Código Penal”.
Ese artículo establece que “cuando hubiere motivo bastante para sospechar que una persona ha participado en la comisión de un delito el juez procederá a interrogarla”.
En dicho acto se imputará, por primera vez en 20 años, distintos hechos vinculados a la desaparición forzada del estudiante de la UNCo, Sergio Ávalos, dentro de las instalaciones de Las Palmas,tal como lo anunció este medio que viene siguiendo los por menores de la causa.
Fuentes oficiales y la querella de Ávalos, integrada por Sergio Heredia y Leandro Aparicio, confirmaron estas primeras imputaciones.
Incluso, Heredia confió: "a esas 20 imputaciones esperamos que se sumen otras 20 más que hemos propuesto nosotros y que alcanza a personal policial que investigó la causa".
A partir de febrero el juzgado federal 2 recibirá las designaciones de abogado defensor y entre el 21 de febrero y el 15 de marzo se concretaran las imputaciones del dueño Pedro Nardanone y el encargado Patricio Sesnich así como también de todos el personal de la seguridad de Las Palmas que estaba integrada por miembros del Ejército en actividad, algo ilegal, y de la Policía del Neuquén.
La hipótesis principal da cuenta que el personal de Seguridad golpeó y mató a Sergio y luego sacaron el cuerpo en un vehículo y lo hicieron desaparecer. Esa desaparición, es entendida por la justicia federal como un delito de lesa humanidad por lo que no prescribe. La pena que establece es la prisión perpetua.
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