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Cómo juega el Lobo mendocino, el rival de Cipo en semis

Se armó para ascender y estuvo muy cerca, pero flaqueó en el camino. Alasia es ídolo del Albinegro.

Sofía Ibáñez

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Cipolletti.- Luego de la épica clasificación en Salta, Cipolletti ya prepara su próximo duelo por las semifinales de este Federal A. Pasaron los festejos y ahora, tanto hinchas como jugadores piensan en lo que viene.

Gimnasia y Esgrima de Mendoza, el rival, salió golpeado del pentagonal del Federal A. El partido desempate contra el ascendido Agropecuario al que aspiraba en aquella instancia nunca sucedió y todavía duele en el Lobo.

En la última fase, contra Villa Mitre le tocó sufrir en Bahía Blanca, pero luego de local pudo enderezar la historia a su favor. Sin embargo, fue apenas un sedante para un club que ya acarició el ascenso en esta edición, siendo el que más cerca estuvo de conseguir la primera plaza entre los que todavía compiten, y ahora sueña con remendar la chance que dejó pasar.

Durante la fase regular, el equipo mendocino tuvo un andar ejemplar. En la zona 3 de la fase de grupos se clasificó con anticipación, le sacó seis puntos a su escolta, Unión de Villa Krause, y en el nonagonal terminó segundo, para meterse en el selecto grupo de los cinco mejores.

Mientras jugaba el pentagonal, eliminó a Quilmes en la Copa Argentina y clasificó a los 16avos. de final.

Todo continuaba según las expectativas hacia un plantel armado con aspiraciones de ascender. Sin embargo, en la última fecha de la etapa no hizo valer su jerarquía, perdió 2-0 contra Gimnasia y Tiro en Salta, que jugó con un equipo con muchos suplentes porque ya pensaba en la Reválida.

Agropecuario, con fecha libre, festejó el ascenso sin jugar (si los cuyanos sumaban de a tres iban a un partido desempate), pero el Lobo en el norte no apareció.

Fue un baldazo de agua fría, helada, y las críticas llovieron. Un dirigente llegó a decir que los jugadores “no tenían sangre”. En ese marco, el equipo tuvo que cambiar rápidamente de página e iniciar el camino más largo. Contra Villa Mitre perdió en la ida, pero en la revancha, el técnico Darío Alaniz cambió de esquema, arriesgó y lo dio vuelta.

Y ahora le toca Cipo, que tiene en sus filas a tres ex Gimnasia: Lucas Farías, Fabio Giménez y Matías Alasia, un ídolo en el club, protagonista y figura en los dos ascensos del Lobo, que en Cipo también se hizo querer después de las tres definiciones por penales, en las que se destacó.

A esta altura pensaban estar en la B

Juan Azor

Periodista del diario Los Andes de Mendoza

El equipo llega mejor anímicamente. Después de lo que pasó en Salta, hubo una explosión interna muy importante, mucho malestar de la dirigencia con el equipo, que venía muy bien y el día que tiene que hacer valer su jerarquía jugó muy mal. Después, con la derrota contra Villa Mitre las críticas siguieron, pero con la clasificación el equipo siente que levantó, aunque la dirigencia mira de reojo. Ellos a esta altura pensaban estar en la B Nacional. Gimnasia es un equipo con poder ofensivo, sobre todo tiene gol aéreo, aunque no va a estar Palacios Alvarenga, su goleador. Cuando se supo que enfrentaba a Cipo, ya muchos lo empezaron a vivir como un partido muy especial, porque allá está Alasia, quien sin lugar a duda fue uno de los responsables del ascenso. Para los penales es tremendo.

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