El Bolsón: le fracturó los dedos al inspector que lo multó

Un conductor de El Bolsón fue detenido por la Policía de Río Negro luego de fracturarle los dedos a un inspector de tránsito que lo multó por realizar una maniobra inadecuada.

El hecho ocurrió el martes, pero trascendió este jueves cuando el expediente judicial que involucra al conductor comenzó a transitar el recorrido para la imputación del agresor. El hombre enfrenta cargos por lesiones graves.

Los inspectores del municipio local interceptaron al vehículo debido a que el conductor había realizado una maniobra peligrosa, durante un control que efectuaban en la esquina de Sarmiento y Roca.

Uno de los fiscalizadores labró el acta de infracción y cuando se la entregó al hombre para que la firme, éste le arrebató el talonario y le presionó los dedos de la mano izquierda, golpeándole la mano contra la ventanilla del vehículo.

La otra inspectora que participaba del control notificó a la Policía de Río Negro sobre la agresión y los efectivos de la unidad local detuvieron al agresor.

La Policía rionegrina reforzó los controles en las rutas de la región.

El trabajador fue trasladado al hospital local donde los médicos confirmaron la existencia de una fractura en uno de los dedos, motivo por el que la imputación al atacante tiene el agravante por lesiones graves.

El vehículo fue secuestrado, se labró la infracción correspondiente y el hombre involucrado deberá responder también ante la Justicia por las lesiones que le causó a la autoridad vial, que se desempeña bajo la órbita del municipio local.

Tenía la tele prendida en su negocio y le cobraron una multa

Un comerciante de la ciudad de Allen se mostró sorprendido e indignado luego que lo multen por tener un televisor encendido en su local. El supuesto inspector le labró un acta y le pidió pagar una cuota mensual si pretendían utilizar cualquier elemento que reproduzca sonido.

El propietario de un local de ropa urbana recibió la sorpresiva visita de una persona que se presentó como inspector de la Asociación Argentina de Intérpretes y la Cámara Argentina de Productores de Fonogramas y Videogramas, más conocidos como AADI-CAPIF.

“Esa mañana se encontraba mi mujer con una empleada, entró el muchacho que no se identificó ni demostró que era inspector, y labró un acta por tener un televisor encendido”, relató. Agregó que primero pensaron que era una broma, y no lo podían creer.

Según se puede advertir en la notificación, el inspector constató que en el local se comunica y difunde al público música fonograbada. En las observaciones detalló la presencia de “parlantes varios”. El documento no indicaba el monto de la sanción.