Comenzó a construirse en 1972 y recibió el primer vuelo el 9 de julio de 1974. Se llama Carlos Campos en homenaje un piloto que falleció en un accidente.
El aeropuerto de Chapelco “Aviador Carlos Campos”, un emblema del turismo cordillerano en la provincia de Neuquén, cumplió ayer 50 años de vida. Comenzó a construirse en 1972 y fue inaugurado formalmente el 9 de julio de 1974 con el arribo de un avión de turistas.
La aeroestación fue emplazada en terrenos donados por la familia De Larminat, para la construcción y desarrollo de un aeródromo que oficiara de puerta de entrada entre las localidades de Junín y San Martín de los Andes, para permitir a pasajeros, vecinos y turismo en general, el arribo de localidades nacionales e internacionales, según recordó el portal de noticias Realidad Sanmartinense.
El 2 de abril de 1974 la Fuerza Aérea Argentina lo habilitó para permitir el arribo de aviones de mediano porte, registrándose el ingreso de vuelos chárter de la Empresa Austral/Sol Jet. Su primer aterrizaje fue el 9 de julio del mismo año. Con el tiempo se convirtió en la puerta de entrada más importante para el turismo invernal.
En los primeros años de actividad arribaban vuelos comerciales de la empresa Transporte Aéreo de Neuquén, con sus equipos aerocomader, piper-navajo y posteriormente sus flamantes Metros III y Saab 340, que vinculaban a esta región con la capital neuquina, con conexiones a destinos provinciales y de otras provincias, como así también a localidades chilenas. De hecho, estaba dentro de su itinerario el aeropuerto Chapelco, la ruta Neuquén-Chapelco-Bariloche y Puerto Montt, junto a un vuelo regional Neuquén-Chapelco-Valdivia, recordó el portal.
En los años 90 el Gobierno Provincial decidió la construcción de un nuevo edificio acorde al nivel de servicios requeridos por el turismo que visitaba la región por esos años, como así también dotar de comodidad a pasajeros, empresas y personal del aeropuerto.
El nombre de Carlos Campos para el aeropuerto Chapelco
El aeropuerto Chapelco lleva el nombre de Carlos Campos, un aviador que perdió la vida en un accidente en 1995.
Campos piloteaba un helicóptero con el que realizaba una gran cantidad de tareas humanitarias y también colaboraba en los combates de los incendios forestales transportando equipamientos.
Enero de 1995 despegó rumbo al Cerro Tronador para recuperar el cuerpo sin vida de un andinista que permanecía colgado de un risco con su arnés.
Por una fatalidad, perdió el control de la aeronave y se estrelló contra la pared del macizo.
En la actualidad el aeropuerto "Carlos Campos" transporte miles de pasajeros de distintos lugares del país y el mundo y es un emblema del turismo de la provincia de Neuquén.
Tanto en la temporada de invierno, cuando llegan centenares de esquiadores en busca de las pistas del cerro Chapelco, como en verano, cuando arriban turistas para disfrutar los hermosos paisajes que regala la cordillera, el aeropuerto tiene una gran actividad y es el servicio por excelencia para toda la zona sur del territorio.
Hoy, en plena temporada de vacaciones, la aeroestación se encuentra a operando a full con la proyección de seguir creciendo en infraestructura para brindar los mejores servicios a todos los que visiten a este rincón de la Patagonia.
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