Neuquén, una usina donde más se cultivó el voto antiperonista a Javier Milei

La provincia de Neuquén fue una de las usinas donde Javier Milei hizo base territorial, pese a no haberla pisado nunca. El electorado lo respaldó con más del 60% de los votos y está entre las siete provincias que superaron esa marca y entre las tres donde más creció el voto opositor, entre el balotaje del 2015 y 2023.

En términos de votos la oposición sumó más de 76 mil sufragios, con un crecimiento del 13%, números que están dentro de las tres provincias donde el antiperonismo creció de manera escalonada. Por antiperonsimo puede leerse voto bronca, odio o una fuerte reactividad hacia el oficialismo y todo lo que venga de la política tradicional.

El dato lo arrojó el Centro de Investigación y Acción Social (CIAS), una institución de los jesuitas en Argentina, dedicada a la investigación social y la formación de líderes, y fue difundido por el periodista Carlos Pagni en su columna Odisea de los lunes por LN+. El análisis se hizo en base a los datos comparativos de los dos balotaje den Argentina.

De acuerdo a los datos de la investigación del CIAS, Neuquén está dentro de esas provincias del voto fuerte de Milei, como Córdoba (74,05%), Mendoza (71,14%), San Luis (67,99%), Santa Fe (62,42%), Entre Ríos (61,48%), San Juan (60,65%) y Neuquén (60,42%).

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Javier Milei sacó más del 60% del os votos en Neuquén. En 2015 había ganado el peronismo en el balotaje, pese a la victoria nacional de Mauricio Macri.

Pero la marca de más del 60% no fue lo más sobresaliente del efecto del voto de Milei, sino otros datos comparativos, respecto de cómo subió el voto opositor en las provincias. En Neuquén, particularmente, la Libertad Avanza tuvo un mejor desempeño en el balotaje, que en el de 2015 cuando ganó Mauricio Macri con Cambiemos.

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En el balotaje de 2015, Cambiemos había sacado 177.350 votos (47,14%) perdiendo en un mano a mano con el Frente para la Victoria (Daniel Scioli) que había obtenido 198.873 votos (52,86%). En esa segunda vuelta, el peso del peronismo al final del mandato de Cristina Kirchner era muy fuerte en la provincia, pese a la victoria de Macri a nivel nacional.

Pero en el balotaje de 2023, el comportamiento del voto opositor (encarnado no sólo en Milei sino en la disgregación de Juntos por el Cambio) fue muy superior al de 2015.

La Libertad Avanza sacó 253.772 votos (60,42%) mientras que Unión por la Patria, encarnado en Sergio Massa obtuvo 166.022 sufragios (39,57%). En esta segunda vuelta, siete años después la oposición sumó 76.122 votos, es decir, un 13,28%.

Según los datos del CIAS, la provincia donde más creció el voto opositor entre un balotaje y otro fue San Juan (20,44%) y le siguen Mendoza (13,63%), Neuquén (13,28%), Entre Ríos (7,65%), Santa Fe (7,09%), San Luis (3,83%) y Córdoba (2,54%).

Salvo en la provincia mediterránea donde el voto opositor está consolidado y el peronismo tuvo pocas chances en estos últimos años, las demás provincias de Cuyo y La Patagonia, como San Juan, Mendoza y Neuquén, fue el núcleo duro del crecimiento de opositores ante un balotaje, en el interior del país.

Al oficialismo no le fue bien y comenzó a perder votos luego de la pandemia. En el balotaje de Neuquén de 2015, el peronismo ganó las elecciones, con 198.873 votos (52,86) y en 2023 bajó a 166.022 sufragios (39,57%), pese que que en ocho años hubo un crecimiento del padrón electoral.

En dos gestiones de gobierno, de ese sector del peronismo se fugaron 32.851 votos. Pese a la campaña de Sergio Massa en Neuquén y la fuerte apuesta de los gremios (estatales y privados), no se lograron torcer los números desfavorables.